Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El impacto del cambio de régimen en Siria respaldado por EEUU, Israel y Turquía
OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González
Sobre este blog

En el Comité español de ACNUR recaudamos fondos para atender las necesidades de las personas refugiadas y desplazadas más vulnerables, apoyando los programas de ayuda humanitaria de ACNUR (nutrición, atención médica, agua potable y saneamiento, educación, refugio e infraestructuras básicas, asistencia legal y protección internacional).

En la actualidad, 34,4 millones de personas reciben la asistencia de ACNUR en más de 120 países. www.eacnur.org

El coste de la violencia para los congoleños

Campo de refugiados de Mugunga III, Congo. Foto: ACNUR/F.Noy

Amaia Celorrio

También se conoce a la RDC como la “Capital Mundial de las violaciones”, que han sido denunciadas y consideradas por la ONU como crimen de guerra y de lesa humanidad. Estimaciones conservadoras de Naciones Unidas calculan que en la RDC 48 mujeres son violadas cada día por los grupos armados que luchan por el poder y el control de la región de los Kivus, al este del país, donde se concentran buena parte de las minas de coltán, casiterita, oro y diamantes.

ACNUR viene alertando desde el mes de abril del recrudecimiento de la violencia en Kivu norte, por los combates entre las milicias Mai Mai y el Frente Democrático de Liberación de Ruanda, y en Kivu sur, entre las fuerzas gubernamentales y el grupo M23, que en pocos meses ha provocado el desplazamiento interno de más de 500.000 personas y la búsqueda de protección en Ruanda y Uganda de 60.000 refugiados congoleños.

Las necesidades de protección, alojamiento y asistencia humanitaria son enormes en el este de Congo, donde decenas de miles de personas viven en campos gestionados por ACNUR y muchos más en asentamientos espontáneos o con familias de acogida.

Sukuru, de 10 años, y su familia huyeron de su casa en Kivu norte al campo para desplazados internos Mugunga III y ACNUR les ha acompañado en su día a día junto a una cámara.

Sukuru, cuyo nombre significa Gracias en swahili.

El padre de Sukuru, Baseme, y su hermano pequeño en la tienda en la que viven.

Sukuru, con camiseta oscura, contesta a su profesor.

Eugenie, la madre de Sukuru, recoge agua potable.

Baseme y su cuñado construyen un nuevo refugio en el campo.

Al final del día, la familia de Sukuru disfruta de la comida.

Todas las fotos son de ACNUR/F.Noy.

Sobre este blog

En el Comité español de ACNUR recaudamos fondos para atender las necesidades de las personas refugiadas y desplazadas más vulnerables, apoyando los programas de ayuda humanitaria de ACNUR (nutrición, atención médica, agua potable y saneamiento, educación, refugio e infraestructuras básicas, asistencia legal y protección internacional).

En la actualidad, 34,4 millones de personas reciben la asistencia de ACNUR en más de 120 países. www.eacnur.org

Etiquetas
stats