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La Junta de Andalucía recupera el control de su comunidad tras cedérselo 24 horas al Gobierno para gestionar el apagón

Juan Manuel Moreno, presidente andaluz, escucha la conversación entre el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, y el consejero de Presidencia, Antonio Sanz.

Daniel Cela

Sevilla —
29 de abril de 2025 19:28 h

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Durante algo más de 24 horas, la máxima autoridad de Andalucía no ha sido el presidente de la Junta, sino el ministro de Interior. El Ejecutivo de Juan Manuel Moreno ha recuperado esta tarde el control político de su territorio que, un día antes, decidió delegar en el Gobierno de Pedro Sánchez para gestionar la mayor crisis energética que ha sufrido España, y que dejó el país a oscuras e incomunicado durante horas.

Andalucía “es un país”, dicen a menudo todos los dirigentes autonómicos de todos los signos políticos, para describir la comunidad más poblada de España, con 8,6 millones de habitantes, dividida en 785 municipios en ocho provincias, cada una con una realidad socioeconómica distinta, con el 80% de la población concentrada en las capitales y grandes urbes. El apagón masivo en esta región no es homologable al del resto de comunidades en emergencia máxima, que también cedieron el mando al Estado.

Moreno fue el primero, de las ocho comunidades en nivel 3 de emergencia, en delegar su autogobierno al Ministerio de Interior, argumentando que la caída del suministro eléctrico en toda Andalucía -junto a los problemas de seguridad ciudadana y de interrupción de las comunicaciones que había provocado el apagón- superaban el marco competencial de la administración autonómica.

Otros gobiernos regionales del PP dieron el mismo paso -Madrid, Comunidad Valenciana, Murcia- pero este martes sus presidentes se lanzaron al cuello de Sánchez, acusándole de no proporcionarles información sobre las causas del apagón, de reaccionar demasiado lento para restituir el suministro, de dar una imagen “venezolana” de un país de la UE a oscuras. En Andalucía, por ahora, ha primado la concordia y la coordinación entre administraciones, como ya ocurrió en la gestión compartida de la DANA que impactó hace meses en Málaga, Almería y otras partes de Andalucía.

Esta tarde, el Gobierno de Moreno solicitó al Ministerio de Interior desescalar al nivel 2 de emergencias, y recuperar así el control directo de la situación provocada por el apagón. Sólo dos horas antes había descartarlo categóricamente esta opción. Dijo que no a las 12.22 horas -cuando el suministro eléctrico se había restablecido en prácticamente todo el territorio-, volvió a rechazarlo públicamente a las 13.45 horas, y finalmente, a las 15.30 horas se cursó la petición formal al Centro Nacional de Seguimiento y Coordinación de Emergencias (Cenem) para recuperar el mando único.

“El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha autorizado la desescalada con efecto inmediato en atención a la solicitud de la Junta”, confirman fuentes del Gobierno central, tras la reunión del CECOP presidida por el ministro, a la que también estaba convocado el consejero de Presidencia y responsable de Emergencias en Andalucía, Antonio Sanz.

Entre el lunes y el martes, Sanz ha compartido un maratón de horas de trabajo conjunto con el delegado del Gobierno en esta comunidad, Pedro Fernández, del que han informado ambas administraciones perfectamente coordinadas y sin asintonías notables. El número dos de Moreno había pedido al Ejecutivo central “garantías” de que no habría marcha atrás en la crisis, es decir, que el suministro eléctrico no volvería a caer, afectando a las comunicaciones, al tráfico ferroviario y a otros transportes. Grande Marlaska dio luz verde, tras una reunión con los responsables de la Junta que duró varias horas.

Del ciberataque al bulo

A Moreno el apagón del lunes a las 12.33 horas le pilló rodeado de dirigentes sindicales de CCOO, que celebraba su congreso regional en un hotel de Sevilla, con la asistencia de un nutrido grupo de periodistas.

Allí, en los pasillos del hotel, junto a su consejero de Presidencia, el presidente andaluz especuló con que el origen del apagón podía deberse a un ataque terrorista contra el suministro eléctrico de España y de otros países de la UE. “Todo apunta a que un apagón de esta magnitud sólo puede deberse a un ciberataque”, dijo ante los micrófonos, algo que no estaba confirmado entonces ni ahora. Red Eléctrica lo ha descartado, pero el presidente Pedro Sánchez no, y ha ordenado que se abra una comisión de investigación para depurar responsabilidades, señalando, de paso, a los operadores privados.

Ese primer comentario de Moreno sobre el apagón, cuando todo era muy reciente y apenas circulaba información oficial, vse lo han reprochado este martes todas las fuerzas políticas que rivalizan con él en Andalucía, y que desde hace meses están en modo preelectoral. Las elecciones autonómicas tocan en junio de 2026, pero las encuestas le son propicias a Moreno y sus contrincantes especulan con un adelanto electoral tras el verano o tras las Navidades. El último barómetro del Centra vaticina una nueva mayoría absoluta del PP, peso a la irrupción de María Jesús Montero al frente del PSOE.

“La recuperación del sistema eléctrico y la normalización paulatina de la situación en hospitales e infraestructuras esenciales han permitido la desescalada del plan”, ha resuelto la Consejería de Presidencia, tras recibir la documentación del Gobierno. Tras el sí de Marlaska, Andalucía pasa a Situación Operativa 2, esto es, emergencias que no pueden controlarse o que hay riesgo de que no se puedan controlar con los medios ordinarios propios de la Junta de Andalucía y, sea necesario o vaya a ser necesario la aportación de recursos y medios extraordinarios de la Administración General de Estado o de otras comunidades. 

El Ejecutivo andaluz nunca había delegado el mando único en la gestión de una emergencia de nivel 3, ni siquiera en la pandemia de coronavirus, porque en ese momento el Gobierno central declaró la emergencia de interés nacional y tomó el control de la situación en todo el país.

Red Eléctrica Española y la compañía suministradora Endesa confirmaron por la mañana que el cien por cien de las subestaciones contaban con respuesta, más allá de algunas incidencias por acoplamiento que se han ido atendiendo conforme se han ido notificando. Todos los centros sanitarios andaluces recuperaron el suministro eléctrico en las últimas 12 horas. El último hospital en recuperarlo fue La Inmaculada, de Huércal-Overa (Almería) alrededor de las 12.00 horas, aunque algunos consultorios auxiliares de zonas puntuales de sierra de las provincias de Córdoba o Jaén seguían presentando incidencias.

La Junta de Andalucía ha mantenido la actividad en los centros educativos, aunque sin carga lectiva por orden del Ministerio de Educación. Una vez recuperadas sus competencias, la Consejería de Desarrollo Educativo informará a los centros educativos que este miércoles recuperen la actividad docente ordinaria. En relación al servicio de comedor, se prestará siempre que sea posible garantizando la seguridad alimentaria del alumnado. En caso de que no haya certeza se procurará un menú alternativo. 

El 112 ha atendido desde el inicio del apagón general un total de 3.328 incidencias en Andalucía, desde las 12:00 horas del lunes 28 hasta las 14:00 horas de este martes. Los avisos más requeridos al centro de coordinación han sido asistencias sanitarias (1.518), rescates y salvamento (295), incidencias de tráfico (267), seguridad ciudadana (248), servicios sociales (203), anomalías en servicios básicos (162) y accidentes de circulación (100). Por provincias, los avisos se han concentrado especialmente en Sevilla (760) y Málaga (723), seguidas de Cádiz (423), Granada (393), Córdoba (336), Jaén (263), Almería (262) y Huelva (168). Los Metros de Sevilla, Málaga y Granada han vuelto a operar con normalidad, así como el Trambahía y los autobuses metropolitanos.

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