Las mujeres con cáncer de mama ultiman una demanda colectiva contra el Gobierno andaluz por “grave negligencia”

La Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama) va al choque de trenes con el Gobierno andaluz. La entidad que destapó el escándalo de los diagnósticos tardíos de cáncer que afectan a unas 2.000 mujeres, según cifras de la Consejería de Salud, ultima una demanda colectiva contra el Ejecutivo de Juan Manuel Moreno por “grave negligencia” en el protocolo de detección precoz “que puede tener consecuencias penales”.

La representación legal de Amama, en manos del abogado Miguel Jiménez Soto, ya ha denunciado ante la Fiscalía al Servicio Andaluz de Salud (SAS) por casos concretos de mujeres con cáncer de mama que se enteraron hasta dos años tarde de que le habían detectado una “lesión dudosa” o “no concluyente”, que luego se confirmó como un tumor maligno.

Ahora, la entidad está recopilando “miles” de denuncias de mujeres que han “colapsado” los teléfonos de la asociación y este martes confirmarán si aglutinan todas dentro de una misma demanda colectiva. “En esta semana se ha convocado a todas las afectadas para tener un primer encuentro informativo, deducir el numero de mujeres perjudicadas, y decidir las acciones a emprender, de lo que se dará cuenta a la ciudadanía y a la propia Consejería de Salud”, advierten desde la ONG.

En un comunicado durísimo difundido este domingo al borde de la medianoche, la junta directiva de Amama cargó contra la Consejería de Salud y contra el propio presidente de la Junta, al que afeó sus palabras del viernes pasado, cuando explicó que no se había informado a las 2.000 mujeres del resultado “dudoso” de su cribado de cáncer para no generarles “ansiedad”.

El protocolo de diagnóstico precoz de cáncer de mama, por el que pasan cada año 485.000 mujeres en Andalucía entre 49 y 71 años, arroja tres posibles resultados: positivo, negativo o dudoso. Esta tercera categoría es la que centra toda la polémica. El protocolo dice que un resultado “no concluyente” es, en el 98% de los casos, “una lesión posiblemente benigna”. En el 2% restante se encontrarían las posibles afecciones, son esas 2.000 mujeres, según cálculos de la Junta, a las que la Consejería de Salud ha empezado a llamar “una a una” para informarlas y confirmar si son casos positivos o negativos.

“Rechazamos de plano las manifestaciones del presidente de la Junta de Andalucía manifestando que lo que se ha pretendido era no generar ansiedad en las mujeres. Esa manifestación no sólo es, a nuestro juicio un craso error, sino que genera asimismo más crispación. Ahora si que se está provocando ansiedad a las mujeres. La falta de información lo que ha venido a provocar es más cáncer, más gravedad, y menos posibilidades de curación, todo ello por el tiempo transcurrido”, dice el comunicado.

Este lunes el Ejecutivo andaluz ha remitido un escrito a los medios de comunicación reafirmándose en las palabras de Moreno: “El 98% son casos sanos. Podríamos decir ”falsos positivos“ y no se les informa con anticipación para no alarmar. A partir de ahora sí se va a hacer”, advierten.

La reunión de la junta directiva de Amama con la consejera de Salud, Rocío Hernández, el pasado jueves no sirvió para destensar los ánimos, al contrario. Las mujeres acusaron a su interlocutora de haberles “reñido”, de reprocharles que se reunieran antes con el PSOE que con ella, de “politizar” el problema y de “manipulación del sistema sanitario andaluz” (palabras que usó el día antes durante una entrevista en Cadena Ser). También les afeó que “vieran el vaso medio vacío”, tras enfatizar que sólo el 2% de esas 2.000 mujeres podría estar en riesgo real de tener un cáncer.

“Hemos exigido a la Consejería de Salud, y exigimos, como no podía ser de otro modo, que se depuren todo tipo de responsabilidades hasta sus últimas consecuencias. En la reunión mantenida con la consejera, se preguntó en reiteradas ocasiones donde estaba el origen de lo que consideramos una gravísima negligencia, sin que en el momento en cuestión se nos pudiera dar respuesta alguna, ni nos consta que se haya revelado algo posteriormente al efecto”, asegura el comunicado de Amama.

La Consejería de Salud no ha aclarado aún cuál es el origen de los “errores” en el protocolo de detección precoz del cáncer de mama, aunque sí apunta a que se debió a un “problema de comunicación”. Un resultado dudoso en un cribado de cáncer no se le comunica a la paciente, los radiólogos deciden hacer una segunda prueba para estar seguros, pero el plazo para realizar ese test de confirmación oscila entre el mes y el año, según la propia Junta. En ese tiempo, la paciente ni siquiera es consciente de que han encontrado una mancha “sospechosa” en su pecho.

Amama tampoco ha cuantificado el total de afectadas, pero sí asegura que le han llegado denuncias de mujeres de las ocho provincias andaluzas. “No podemos aun cuantificar el número de afectadas porque como hemos dicho, siguen colapsando nuestros teléfonos, correos, etc. Cientos de llamadas de mujeres alertadas y lo que es peor, con miedo”, aseguran, recriminando a la Consejería de Salud que “no deje de hacer diarias y erróneas apreciaciones sobre el número de afectadas” y de “generar así aún más confusión”.

El departamento de Salud se ha comprometido a llamar a todas las mujeres y a revisar todas las mamografías del cribado desde hace tres años. Amama ya trasladó el problema de los diagnósticos tardíos de cáncer a los dos anteriores consejeros de Salud: Jesús Aguirre, actual presidente del Parlamento andaluz, que ocupó el cargo entre 2019 y 2022; y Catalina García, que estuvo entre 2022 y 2024, cuando toma el relevo Hernández.

Amama tilda el asunto de “absoluta negligencia” y descarta de plano que pueda calificarse de “error, fallo o falta de comunicación”, como está haciendo el Gobierno andaluz, y aseguran que las “disculpas del señor Moreno Bonilla y de la consejera no son suficientes, y deberían saberlo”. También han afeado que otros portavoces del SAS hayan aparecido en medios de comunicación “intentando justificar lo que a todas luces es injustificable”. “Ello lo único que denota es que no son personas, a nuestro juicio, cualificadas para ostentar dichos cargos”, concluyen.

La titular de Salud se ha refugiado en un plano secundario desde que la semana pasada aceptó entrevistas y se reunió con las afectadas. Hernández lleva desde el viernes sin hablar ante los medios y, en su lugar, ha intervenido este lunes el consejero de Presidencia, Antonio Sanz: “Esto no puede volver a ocurrir”, ha dicho, en referencia al problema de las mujeres afectadas por un diagnóstico tardío de cáncer.