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“Se junta en un mismo grupo alumnado de diferentes cursos y edades”

Imagen de archivo de un aula escolar | EFE

Rubén Alonso

El Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Cantabria (STEC) denuncia la “falta de flexibilidad” de la Consejería de Educación en la negociación para el curso 2017-2018 del 'arreglo escolar', como se conoce al procedimiento para planificar el número de unidades (grupos de alumnos) con que van a contar los colegios públicos en el curso siguiente, especialmente a aquellos con necesidades especiales.

La denuncia que hace el sindicato STEC viene motivada por el hecho de que “el único criterio” que está manteniendo la Administración a lo largo de este proceso es “meramente cuantitativo”, es decir, la matrícula de alumnado. Se trata de “números simplemente”, recalca.

Como consecuencia de este criterio cuantitativo son varios los colegios que se ven “seriamente perjudicados al suprimir unidades”, tal y como señala STEC. En algunas situaciones, el centro “pierde su estructura de líneas completas”, que permiten mantener un grupo en cada nivel de Infantil y Primaria.

En las situaciones más graves, según denuncia el sindicato, “se está juntando en un mismo grupo alumnado de diferentes cursos y edades”. Este último caso es el de varios centros de Santander que salen “muy mal tratados” al agrupar en un mismo aula a alumnos de cursos diferentes.

Para el STEC “no es presentable” la actitud de la Consejería, manteniéndose “impasible” ante las propuestas que se les vienen haciendo de “no suprimir jurídicamente una serie de unidades”.

“Únicamente se han conseguido vagas promesas de alguna solución provisional después del periodo de matrícula”, lamenta esta agrupación sindical, que pone el foco en “la falta de concreción y en la ausencia de criterios cualitativos” como “principal” problema.

Es por ello que sus miembros exigen “una solución a las demandas planteadas por los centros afectados” en relación a este asunto. Asimismo, insta al Consejero de Educación, Ramón Ruiz, a que “se implique en la negociación” y a que “tenga en cuenta otros criterios que no sean solamente el número de alumnos/as por grupo”. En última instancia, el STEC demanda “un cambio de actitud” de la Consejería que permita “una mayor sensibilidad” a la hora de tratar la atención a la diversidad.

En relación a esto último, este colectivo manifiesta su “preocupación” por la “poca sensibilidad” que esta Institución está demostrando en esta cuestión de la diversidad a lo largo de todo este proceso de 'arreglo escolar', a pesar de que esta Administración “ha querido hacer bandera” de esta faceta del sistema educativo.

Todo ello se tendría que traducir en la práctica en “un análisis cualitativo de la problemática de cada uno de los colegios sobre los que en estos momentos, y después de un mes de conversaciones, estamos manteniendo discrepancias, para darles, finalmente, una solución individualizada a cada uno de ellos”, afirma STEC.

Necesidades específicas

Este sindicato quiere poner de relieve el hecho de que “solo sea la red pública de centros la única que, en conjunto y de forma mayoritaria, atiende a alumnado con necesidades específicas”. Ante este panorama, sus integrantes recalcan que debería de conferirle “un trato diferencial” en relación a la red concertada, y eso “no se está produciendo”.

“Es inaceptable que la red pública de algunas localidades de Cantabria, como por ejemplo Santander, se vea afectada por supresiones de unidades mientras los colegios privados concertados de alrededor siguen creciendo a costa de los presupuestos públicos”, denuncia esta agrupación. “Exigimos que se revierta esta política”, concluyen sus miembros.

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