Castilla-La Mancha recurre ante el Supremo la 'reválida' de sexto de Primaria
El Consejo de Gobierno ha autorizado al gabinete jurídico de la Junta de Comunidades a presentar un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Supremo en contra del Real Decreto 1058/2015, documento que regula las características generales de las pruebas aprobadas por el Gobierno de España para evaluar los conocimientos de los alumnos de sexto de primaria en las asignaturas troncales. Se trata de la conocida como 'reválida', que pretendía, según afirmó el Ministerio, establecer unos aspectos comunes para todas las Comunidades.
Reyes Estévez, consejera de Educación, explicó que la Comunidad Autónoma ha agotado todas las posibilidades para impedir que se llevase a cabo dicha prueba, habiendo remitido también un requerimiento el pasado mes de enero al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, lo que fue, sin embargo, rechazado. Así mismo, la responsable ha anunciado que su departamento emitirá una solicitud de convocatoria “urgente” de la comisión general de Comunidades Autónomas al presidente del Senado para valorar la situación de la implantación de la LOMCE.
Por otro lado, el Gobierno regional ha solicitado también al Ministerio de Educación la convocatoria “urgente” de la Conferencia de Educación, “rogándole” en palabras de Estévez, debido a los problemas que consideran está trayendo al alumnado la implantación de dicha Ley. “Ante la falta de decisión de fecha y la urgencia, hemos hecho llegar otro escrito para insistir en la necesidad inaplazable de la Conferencia de Educación, que reitera el compromiso adquirido del Ministerio”, asegura la consejera.
En relación a la 'reválida', la responsable de Educación señala que ya son 12 Comunidades Autónomas las que se han mostrado en contra de la prueba. En el caso de Castilla-La Mancha, el Gobierno señala que la prueba “carece” de carácter continuo u orientador propio, que es una de las razones por las que se ha implantado. “Carece del consenso necesario”, afirmó Estévez que concedió que la titulación del alumnado no está condicionada por la prueba. Sin embargo, señala, genera “ansiedad innecesaria” en el alumnado y supone también un “cuestionamiento implícito” de los profesores y su labor. “Las pruebas dan pie sólo a la elaboración de ránkings que no aportan beneficio alguno al alumnado”, señala.
La consejera ha criticado duramente la “indefinición y el desamparo en el que nos tiene sumidos el ministro”, lo que, afirma, impide que se pueda tomar esta prueba en las “mejores condiciones”. De este modo, ha señalado que “no se puede” llevar dicho examen a alumnos, familias y profesores “sin más explicaciones” que su regulación ministerial. En este sentido, asegura que en la última Conferencia de Educación, el pasado mes de agosto, no se tocó el tema, a pesar de que existía un compromiso de convocatoria asumido por el propio Ministerio, según afirmó.
De este modo, Estévez criticó que el Gobierno en funciones “aleja el foco” de las situaciones que son “verdaderamente” importantes para los padres y las familias, como la ausencia de criterio en las formaciones profesionales básicas, o las consecuencias “irreparables” de que los alumnos de 4º de la ESO tengan que elegir un cauce. “Tratando de alejar un foco de estos graves problemas que sí afectan a la educación de esta región, lo único que hace el Gobierno es enfrentar más problemas”, afirmó la consejera.
En Castilla-La Mancha, según la consejería, no se realizará la reválida, “a menos” que el Ministerio subsane las deficiencias que ha encontrado el Ejecutivo. “Es todo un desbarajuste y un sinsentido que intentamos solucionar las Comunidades Autónomas”, explicó Estévez, quien recalcó que es la Conferencia de Educación la que debe plantear esta situación. “Han incumplido la palabra, nos han citado en encuentros bilaterales pero esto es más serio. Nosotros queremos cumplir la Ley”, concluyó.
