La nueva Ley de Caza amenaza con aprobarse durante este periodo de sesiones
La nueva y polémica nueva ley de caza de Castilla-La Mancha podría aprobarse antes de que termine el actual periodo de sesiones, según lo ha anunciado el portavoz del Gobierno regional, Leandro Esteban. Esteban ha asegurado que esto es una nueva noticia, al renovar una normativa con más de 15 años, y que, según asegura el político, se realizará un avance importante con alrededor de 6.500 puestos de trabajo, 1,6 millones de jornales y 600 millones de euros.
Esteban ha asegurado también que el Anteproyecto de ley de Caza es el preludio de una legislación con “carácter social”, y que servirá para reducir los trámites en el ámbito de la caza, que garantizará también sinergias en la protección del medio ambiente. Ante esto, Ecologistas en Acción ha asegurado desde el anuncio de la Ley que las consecuencias en el entorno rural serán muy negativas.
Según denuncian los ecologistas, la ley permitirá cerrar caminos, la caza con trampas, el cambio de modelo de la caza con más intensidad y comercial en cotos más cerrados y vallados, multas a cualquier distorsión de la actividad de la caza por parte de cualquier persona o prácticas masivas que atentan contra la seguridad no sólo de especies protegidas como el lince ibérico sino contra la de las propias personas.
Además del impacto ambiental, el colectivo ha denunciado a la Junta de Comunidades por actuar con “clandestinidad”, escondiendo el Estado real del anteproyecto y luego aprobándolo sin consultar, situación que se ha repetido con anterioridad durante la legislatura. “Ya se acaban los adjetivos para definir la lamentable forma de actuar del Gobierno y de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente”, ha asegurado el colectivo.
Por su parte, la Plataforma contra la Ley de Caza ha anunciado alegaciones para intentar frenar determinados puntos de la ley, que consideran tendrán un impacto especialmente negativo, sobre todo en el estado rural. Esta suma de colectivos, además, ha presentado de forma reiterada su rechazo a la aprobación, con puntos que incluyen prácticas como la subvención de la caza intensiva.
