Museo Ruiz de Luna, la historia de Talavera a través de la riqueza de su cerámica
“La cerámica es la seña de identidad de Talavera de la Reina y a través de ella se puede conocer la historia y la cultura de una comarca y de una ciudad”. Así lo ha señalado Fernando Luis Fontes, director del Museo Santa Cruz de Toledo y de todos sus museos filiales entre los que se encuentra el Museo Ruiz de Luna de Talavera, uno de los pocos museos monográficos que hay en España dedicados a la cerámica y “uno de lo más importantes, junto con el Museo Nacional de Cerámica González Martí de Valencia”.
Han pasado más de veinte años desde que se inauguró este espacio museístico en Talavera de la Reina y en la actualidad sigue siendo un museo “vivo, participativo e inclusivo”, apunta su director. Gracias a la labor de Juan Ruiz de Luna, considerado uno de los mejores ceramistas del siglo XX, y, de forma especial, a su trabajo paciente como coleccionista al constituir uno de los conjuntos de cerámica histórica de Talavera más importantes que existen y, gracias a la adquisición de ésta por parte del Estado (con la colaboración de la Diputación Provincial y del Ayuntamiento de Talavera de la Reina), se ha hecho posible que podamos disfrutar hoy de este museo.
Durante décadas, las piezas que conforman la colección permanente de este museo estatal estuvieron ubicadas en el antiguo museo privado de los Ruiz de Luna -un local situado en la plaza del Pan- y, después, en los sótanos del edificio del Banco de España. Así estuvieron hasta que el 14 de febrero de 1996 el Museo de Cerámica Ruiz de Luna abrió sus puertas al público en el antiguo y rehabilitado Convento de los Agustinos.
En concreto, el Museo Ruiz de Luna de Talavera de la Reina está situado en pleno casco histórico de la ciudad y ocupa dos edificios, el antiguo convento agustino del siglo XVII, la ubicación original del Museo desde 1996, y la antigua Iglesia de San Agustín, que es más conocida en la ciudad como el Liceo, un edificio colindante que se abrió en 2013, como ampliación para la exposición de azulejería.
Historia de Talavera y sus alfares
La exposición permanente recoge piezas cerámicas y azulejería que abarcan desde el siglo XVI hasta la actualidad. Además, el museo cuenta con una pequeña sección de arqueología, situada en el sótano del museo, donde se puede contemplar una pequeña selección de restos arqueológicos de diferentes épocas. “Van a descubrir el potencial y el atractivo que tiene la cerámica a través de sus diferentes series históricas”, asegura el director del museo.
“La inmensa mayoría de las piezas provienen de la colección privada de Ruiz de Luna pero a lo largo del tiempo tanto el Estado, como la Junta como otras instituciones han ido adquiriendo piezas para este espacio”, explica el director. Entre otras, Fernando Luis Fontes pone de ejemplo diferentes retablos cerámicos que formaban parte de iglesias y que están expuestos en la parte del Liceo o la Iglesia, que es la parte más moderna de la colección de azulejería.
Para el director de este espacio museístico es difícil elegir una pieza del Museo aunque hay dos que le llaman especialmente la atención: “Estoy enamorado del Escudo de Santa Catalina, que realizó Gaitán en 1608, una pieza excepcional de azulejería, una joya de la tradición renacentista”. Además, también ha puesto en valor, El Retablo de Santiago, “espectacular tanto en tamaño como en diseño”.
Balance del Museo
“Desde su apertura el Museo ha tenido una acogida muy importante porque es uno de los elementos culturales más importantes de Talavera de la Reina y de su comarca”, apunta su director. Un Museo que no solo lo visita gente de la ciudad, sino que cuenta con muchas visitas de grupos los fines de semana, tanto de estudiantes, como de jubilados, o personas que simplemente van de excursión a Talavera.
“Todavía se puede hacer más por la difusión del Museo pero realmente mi interés ahora es dotarlo de personal técnico para que el Museo tenga más vida”, señala Fontes. Eso sí, reconoce la labor de que lleva a cabo La Asociación de Amigos de Museo precisamente para su difusión. Además, el espacio realiza otro tipo de actividades, como presentaciones de libros u otras exposiciones para conseguir que siga siendo un museo vivo, participativo e inclusivo“.
Objetivos para 2018
De cara al próximo año, explica su actual director, hay un interés por parte de la Junta de Comunidades de dotarlo de más personal, de hecho, asegura que va a salir a concurso la figura de director del Museo. “Dejaría de ser el director de este Museo, para que hubiera uno allí, con lo cual le va a dotar de más capacidad de autogestión porque gestionar un Museo a distancia siempre es complicado pero lógicamente son muchos los museos que dependen de mi, y Talavera podría ganar mucho teniendo una persona allí trabajando”.
Además, para 2018, explica su director, están trabajando en un proyecto con los estudiantes residentes de la Escuela de Cerámica de Talavera. También van a seguir realizando diferentes actividades, como presentaciones de libros y si cuentan con presupuesto, Fontes tiene previsto abordar un proyecto de iluminación de todo el Museo. “La idea es seguir trabajando para darle vida al Museo y renovar toda la exposición para que sea lo más atractiva y lo más sugerente para el público”.