Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El PSOE convierte su Comité Federal en un acto de aclamación a Pedro Sánchez
Las generaciones sin 'colchón' inmobiliario ni ahorros
Opinión - El extraño regreso de unas manos muy sucias. Por Pere Rusiñol

La Ikea valenciana echa el cierre definitivo

Teyoland.

Voro Maroto

Teyoland, la gran superficie de muebles y complementos que abrió en Valencia para competir contra Ikea, agoniza.Cerró en noviembre de 2013, apenas seis meses después de su lanzamiento, y aunque la intención de la nueva dirección era abrir a principios de 2014, ese momento no llegará.

Acosada por las deudas –está en preconcurso de acreedores- y después de meses buscando financiación para retomar la actividad, su nueva dirección ha arrojado la toalla. Según Levante-EMV, la empresa ha prescindido de 17 de los 20 trabajadores que tenía en plantilla. Los tres restantes están gestionando el vaciado de la tienda –los proveedores están retirando el material que no se les puede pagar- y la liquidación de la empresa.

Feria Valencia ya había presentado una demanda de desahucio contra Teyoland, ubicada en uno de sus pabellones, por impago. Debe, según la institución, cuatro meses de alquiler, más de 300.000 euros. Poco después, la compañía valenciana había solicitado el preconcurso de acreedores, una figura jurídica que sirve para blindarse temporalmente en el juzgado ante las reclamaciones de los proveedores a los que se debe dinero.

Teyoland, que se presentó como la alternativa nacional a Ikea, que abre sus puertas en Alfafar (Valencia) en junio, no cuajó. Su oferta de precios, producto y experiencia de compra no sedujo, a la vista del cierre, a los clientes. De poco ha servido que casi todo su catálogo sea de productos españoles, básicamente valencianos. La falta de dinero o músculo financiero tampoco ha ayudado, aunque los inversores arriesgaron –y han perdido- 5 millones de euros en la iniciativa.

Los accionistas apartaron al fundador y rostro visible del proyecto, José Ignacio Tello, de la dirección de la compañía. Ésta nueva gerencia, en el momento del cierre, que dejó a 200 trabajadores en la calle, se mostraba optimista: Adelantaba la reapertura en el primer trimestre de 2014 para “mejorar el servicio y la configuración de nuestras instalaciones, así como ofrecer una mayor gama de productos y precios más competitivos”. No será así.

Etiquetas
stats