El responsable de Zapadores dejará sus responsabilidades en el CIE
El inspector jefe de la Policía Nacional del que depende el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Zapadores (Valencia) ha solicitado pasar a segunda actividad, algo “previsto y reglado” que pueden solicitar los funcionarios de este cuerpo de seguridad a partir de los 60 años, con lo que se producirá su relevo al frente de las instalaciones.
Así lo ha explicado este miércoles el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, al ser preguntado por la petición del responsable de la instalación, donde el pasado 6 de septiembre se produjo un intento de fuga por alrededor de medio centenar de internos.
Moragues ha precisado que no se trata de una dimisión sino de un procedimiento que pueden solicitar los funcionarios de la Policía para obtener “una actividad más tranquila hasta su edad de jubilación”, por lo que ha descartado una relación de causalidad entre la petición y el intento de fuga.
Preguntado por si existe relación entre esta petición del responsable de Zapadores con el intento de fuga que sufrió el centro, Moragues ha señalado que el inspector jefe había expresado su intención de pasar a segunda actividad “anteriormente” y ha añadido que “evidentemente está previsto el procedimiento y es normal que lo pida”.
El delegado del Gobierno ha insistido en que “no hay nada detrás” de esta solicitud, que ha sido “voluntaria” y expresada “unos días antes” del intento de fuga, por lo que desde la administración ya estaban “manejando ese escenario”.
Sobre el relevo en la dirección del CIE, Moragues ha apuntado que “primero se tiene que producir el cese”, para lo que “se abre un procedimiento administrativo, se dará la autorización y el mismo día que se produzca el cese se nombrará al nuevo responsable del centro”.
Los CIE “no son cárceles”
El máximo representante del Gobierno Central en la Comunitat ha asegurado que están trabajando para que “las condiciones del CIE cada vez sean mejores”, por lo que “este verano se ha hecho una inversión de 80.000 euros” y también están trabajando “para incorporar más ONG, entidades benéficas y asociaciones de integración social”, además de las diez que están ya en el centro.
Moragues ha destacado que su intención es “cuidar el aspecto social” porque los CIE “no son cárceles” sino que “lo único es que se les priva de libertad de desplazamiento” pero “tienen uso de móviles, pueden tener cuantas visitas deseen, no son celdas sino habitaciones” y trabajan para “mejorar las condiciones”.
El delegado del Gobierno ha insistido en su voluntad de que “haya más ONG que colaboren para ayudar a estas personas que son inmigrantes de forma ilegal pero que detrás hay derechos humanos y dramas personales importantísimos”.
