Brasil adopta el sistema del Banco Mundial para atraer inversiones extranjeras

El Gobierno brasileño comenzó a divulgar esta semana el nuevo sistema de defensa del Banco Mundial que adoptó para solucionar dudas de organizaciones y empresas con la intención de aumentar la inversión extranjera en el país este año.

El “Ombudsman de Inversiones Directas (OID)”, creado en 1999 por el Banco Mundial, empezó a ser utilizado en Brasil en abril de este año, pero solo a partir de esta semana una comitiva del Gobierno brasileño visita empresas, organizaciones y sindicatos para divulgar la estrategia.

Como parte de la acción, la Secretaria Ejecutiva de la Cámara del Comercio Exterior (Camex), del Ministerio de la Economía, presentó este miércoles, en Sao Paulo, la herramienta a empresarios europeos y brasileños en la Cámara Española del Comercio en Brasil y hará lo mismo en otras diez capitales regionales del país.

“Es un momento muy significativo para divulgar acciones dirigidas a los inversores” porque, si las reformas de las pensiones y tributaria son finalmente aprobados por el Congreso, “la expectativa es que Brasil tenga una inundación de inversiones hasta el fin del año”, afirmó a Efe el subsecretario de Camex, Renato Baumann.

Según el dirigente, muchos inversores se quejan del alto coste de Brasil y de la burocracia y, en este sentido, el “Ombudsman de Inversiones Directas (OID)” puede facilitar la divulgación de que el país está en un “momento de cumplimento de buenas prácticas de responsabilidad social”.

Agregado a esto, la política monetaria y la cuestión fiscal también van ayudar en nuevas inversiones, agregó Baumann.

En un mes, Brasil recibió, a través de esta herramienta, ocho casos sobre cuestiones jurídicas y de financiación interna relacionados con la instalación de energía solar en la nación.

La expectativa del Gobierno brasileño es recibir más dudas y cuestiones relacionadas con el acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea, que puede recolocar Brasil en la cima de la lista de destinos para inversiones, según Baumann.

El subsecretario añadió que otros acuerdos comerciales deben avanzar aún este año como con Canadá, Corea del Sur y Estados Unidos, algo sobre lo que mostró su interés el presidente brasileño, Jair Bolsonaro.

Otra herramienta vigente en Brasil desde 1997 e igualmente impulsada en este plan es el Punto de Contrato Nacional (PCN), un documento basado en las 11 directrices de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Según Baumann, la importancia del PCN es justificar a los nuevos inversores que Brasil es un ambiente seguro y que tiene su comercio exterior pautado en los principios de la organización.

“Si los dos mecanismos se consolidan, los costos con consultores económicos y con la judicialización de procesos empresariales va caer”, apuntó.

Para él, lo que se espera con la acción de la Camex es demostrar que Brasil tiene una “preocupación con la responsabilidad empresarial y que las cosas han mejorado”.

Para el próximo año, Baumann espera impulsar la divulgación de este proyecto con inversores fuera de Brasil.