El expolicía de Amurrio que disparó contra un caserío tenía una treintena de armas inutilizadas en su casa
Un arsenal, aunque en mal estado. Eso es lo que guardaba en su casa el expolicía nacional detenido como presunto autor del disparo efectuado el domingo contra un caserío de una familia abertzale en Amurrio (Álava). En total, la Ertzaintza se ha incautado de una treintena de armas cortas y largas, la mayoría de las cuales estaban inutilizadas o en muy mal estado de conservación.
El detenido tenía también en su poder diversa munición y más de una veintena de proyectiles de artillería, aunque todos ellos estaban “inertes” o no suponían peligro, según ha informado el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco. La Unidad de Desactivación retiró los artefactos encontrados a un lugar seguro para su inspección.
Los hechos ocurrieron el día de Reyes cuando el detenido supuestamente disparó una bala de 9 milímetros contra un caserío del barrio de Lezama de Amurrio perteneciente a la familia Azkarraga Isasi, vinculada a la izquierda abertzale, y de cuya fachada colgaba un cartel para reclamar el acercamiento de los presos de ETA a Euskadi.
El disparo rompió el cristal de la cocina, ubicada en el primer piso, pero nadie resultó herido pese a que había una pareja en la vivienda.
El hombre, de 74 años, fue identificado como el supuesto autor del disparo dos días después del ataque, aunque fue detenido unos días después, cuando el sospechoso colaboró con la Ertzaintza para dar con la pistola utilizada.
Tras pasar por el juzgado de Amurrio ha quedado en libertad provisional a la espera de juicio.
