El Gobierno rechaza un cambio en el modelo en los comedores escolares vascos aunque acepta más “control”

Este viernes es el último día en que la empresa de catering Serunion se encargará del servicio de comedor en la treintena de colegios públicos vascos que asumió a principios del curso escolar y que se reparten en Bilbao, dos zonas de Álava y una comarca de Gipuzkoa: los expedientes por la mala calidad del servicio han llevado a que se pacte su salida y que Educación adjudique esos lotes a otras empresas como Tamar Las Arenas, Cocina Central Goñi o Auzo Lagun, aunque en su día fueron sancionadas y condenadas judicialmente por inflar los precios de este servicio. Entretanto, el Gobierno de PNV y PSE-EE ha rechazado en el Parlamento Vasco una propuesta de EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU para mejorar la calidad de este servicio básico con un cambio de modelo y ha aprobado como alternativa un texto genérico para seguir impulsando el trabajo actual, aunque sí se acepta más “control”.

La oposición de izquierdas entendía que en 2019 ya se había asumido la necesidad de ese cambio de modelo y apostaba por ofrecer la construcción de cocinas en los colegios públicos que lo soliciten para evitar tener que recurrir a catering transportado. Han estimado que podrían ser medio centenar. El documento compartido por EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU apuntaba a un plazo de cuatro meses para acordar varias de las medidas contempladas, es decir, antes de que finalice este curso académico.

Desde el Gobierno, la mayoría absoluta de PNV y PSE-EE se ha hecho valer con una resolución aprobada que remarca que ya se introdujo una enmienda en la reciente reforma educativa de diciembre para “mejorar” el servicio de comedor en la búsqueda de “una alimentación saludable y de calidad”. Precisamente fue uno de los pocos puntos que contó con el consenso del Ejecutivo y la oposición de izquierdas. Se apela también a buscar criterios de “sostenibilidad”. En definitiva, la pauta para Educación es “continuar trabajando en alternativas viables”, pero también teniendo en cuenta criterios económicos.

Eso sí, se ha incorporado un punto en el que se plantea “seguir reforzando los elementos de control y auditoría” como “garantía” de que el servicio diario en los colegios es de “calidad”. Se operará “exigiendo un cumplimiento estricto de las condiciones pactadas con los proveedores”, plantea la resolución de la Cámara. Gorka Álvarez, del PNV, ha remarcado que se modificaron expresamente los presupuestos de 2024 para crear una partida de 3 millones de euros para ir mejorando el modelo de comedores escolares.

Por el contrario, Itxaso Etxebarria, de EH Bildu, ha pedido ir más allá. Porque “el comedor no es un simple servicio de comidas” y ha de “integrarse en el proyecto educativo”. “Afecta directamente a la salud del alumnado y al medio ambiente”, ha planteado. También ha lamentado que no haya más “formación” para “todo” el personal, desde los monitores hasta el personal de cocina o los responsables. La coalición abertzale, asimismo, ha mostrado su preocupación por el uso del euskera en estas horas.