Satse subraya que Inspección ha constatado que Osakidetza “no cumple” la normativa para proteger a su plantilla

El sindicato Satse ha subrayado que, tras su denuncia, la Inspección de trabajo ha constatado que Osakidetza “no cumple” la normativa para la protección de su plantilla frente al riesgo por COVID-19 y que el sistema utilizado para la evaluación del riesgo biológico “no ofrece confianza ni a la Inspección ni a Osalan”, según ha informado la central sindical de enfermería y recoge Europa Press.

En una nota, Satse ha asegurado que, frente al riesgo por COVID-19, ha quedado constatado que Osakidetza “no ha adoptado todas las medidas que podría adoptar para proteger a su personal”.

El sindicato ha señalado que, tras su denuncia, la Inspección de Trabajo y Osalan responden a la misma con un informe de 82 páginas y con un requerimiento dirigido a Osakidetza, donde incluyen más de veinte medidas correctoras que el ente público debe adoptar en el plazo de un mes.

Según ha explicado, le obliga a “corregir las irregularidades” en materia de prevención y protección de la salud y seguridad del personal presentes en sus organizaciones sanitarias.

Satse ha indicado que dos de estas medidas tienen “cumplimiento inmediato”: que el personal disponga de 10 minutos para el aseo personal al finalizar la jornada y antes de la comida, además de una doble taquilla y que se adecue la evaluación de riesgos y las medidas preventivas al personal que trabaja con formaldehido, “ya que es un agente cancerígeno”.

El sindicado ha manifestado que, tras las investigaciones realizadas por la autoridad laboral, ha quedado constatado que “Osakidetza no ha actuado correctamente, y que ha mantenido una inacción incomprensible” ante un riesgo biológico como es el COVID-19, que “está teniendo consecuencias extremadamente dañinas para el personal sanitario, sus familiares y la sociedad”.

“El riesgo por COVID-19 se ha valorado por los servicios de prevención del Ente Público, a lo sumo como moderado para la plantilla, cuando se trata de una enfermedad de gran infectividad con un porcentaje de letalidad del 3,1% en Euskadi, con consecuencias para la salud y secuelas desconocidas, que está siendo aún investigado y que está colapsando los servicios de salud”, ha añadido.

Satse ha afirmado que, tal y como había pedido, la Inspección de Trabajo “pone en evidencia a Osakidetza” recordándole que el 4,1% del personal se ha infectado con coronavirus y que constituye el 16% de los positivos totales del País Vasco, “lo que tenía que haber obligado al ente público a una acción de mejora de las medidas de control a adoptar”. “Algo que Osakitzea no ha hecho y no está haciendo”, ha criticado.

El sindicado ha manifestado que, tras el COVID-19, “lejos de haber reevaluado desde el punto de vista preventivo todos y cada uno de los puestos de trabajo, ”se ha abusado del recurso de los protocolos sanitarios, considerándolos como la única medida preventiva a adoptar para proteger a sus trabajadores frente al riesgo biológico“.

Satse ha apuntado que, entre las “irregularidades constatadas” se señala que Osakidetza en su conjunto está “incumpliendo” la normativa en relación con la protección contra el riesgo biológico en general y contra la covid-19 en particular.

Además, tras su investigación, la Inspección asegura que el Ente Público dispone de “una deficiente evaluación del riesgo biológico,

carente del rigor técnico mínimo exigido“. ”Ni siquiera incluye informes o estudios técnicos que avalen sus valoraciones de consecuencia, exposición y probabilidad de contagio en cada uno de los puestos de trabajo, hecho corroborado en el informe elaborado por Osalan“, ha añadido.

En el informe, según ha explicado, se afirma que “las irregularidades” que se han detectado no obedecen a especificidades de los tres hospitales que han sido investigados tras la denuncia de Satse (Santa Marina, Galdakao y Basurto), sino que “son previas e independientes a la crisis del COVID-19 y se han visto agravadas por este”.

Por ello, ha indicado que, dado que estas “irregularidades” suponen un “incumplimiento” de la ley de prevención de riesgos laborales, así como de varios decretos en esta materia, “su cumplimiento exige una decisión centralizada para que sea instaurado en todos los centros de Osakidetza”.

En el requerimiento se advierte a la Dirección del Ente Público que toda la responsabilidad que se derive del incumplimiento de este requerimiento “recae sobre Osakidetza y sobre sus responsables”.

A juicio de Satse, este informe y su requerimiento a Osakidetza es la “constatación de todas las deficiencias que en materia de seguridad y salud laboral” vienen denunciando desde el inicio de la crisis sanitaria.

“Deficiencias que han afectado, en algunos casos gravemente, a la salud del personal de Osakidetza en general y a las enfermeras en mayor medida, como indican los datos de contagio”, ha denunciado. Por ello, ha exigido a Osakidetza que ponga en marcha de inmediato “todas las medidas correctoras impuestas por la autoridad laboral”.