El Supremo obliga por sentencia al Gobierno a reponer los caudales ecológicos del Tajo hasta el pantano de Valdecañas

El Tribunal Supremo ha decidido que los caudales ecológicos del río Tajo no se puede esperar hasta 2027 para alcanzarlos de forma escalonada en el tramo desde el embalse de Bolarque en Guadalajara hasta el de Valdecañas en Cáceres, como prevé el Plan Hidrológico de ese río 2022-2027, sino que al tratarse de zonas protegidas esos caudales mínimos deben entrar en vigor de forma inmediata. 

La sentencia, con fecha de 6 de mayo y que ha sido divulgada por el colectivo Red del Tajo, es consecuencia del recurso contencioso administrativo interpuesto por la Plataforma en defensa de los ríos Tajo y Alberche y por el Grupo de Acción para el Medio Ambiente (Grama) contra la aprobación del plan hidrológico para el tercer ciclo de planificación de la parte española en la demarcación hidrográfica del Tajo.

Además este martes el Congreso de los Diputados rechazaba por un voto la proposición de ley de la Asamblea Regional de Murcia para que el funcionamiento del trasvase Tajo-Segura y el caudal ecológico del río de la cuenca cedente quedaran en la misma situación en la que estaban en 2014, es decir, blindar la situación actual.

Según esta sentencia del Supremo el plan hidrológico de la demarcación hidrográfica del Tajo (2022-2027) vulnera la normativa europea de aguas, por lo que obliga al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) a restablecer de forma inmediata caudales ecológicos, y no en plazos hasta 2027, en las zonas protegidas del río Tajo, es decir, en todo el recorrido desde el embalse de Bolarque en Guadalajara hasta el de Valdecañas, en Cáceres.

Queda sin efecto el escalonamiento de caudales fijados en el actual plan de cuenca del Tajo para 2025, 2026 y 2027.

La sentencia añade que solo se podría permitir el escalonamiento en tres años en los tramos no amparados por figuras de protección, pero no en las masas afectadas por zonas protegidas de hábitats y especies, en las que además no se hayan identificado sus objetivos ambientales particulares (zonas Red Natura 2000), como es el caso del 100% de las 13 masas de agua tipo río comprendidas entre Bolarque y el embalse de Valdecañas.

El embalse de Valdecañas en Cáceres se encuentra dentro de la Red Natura 2000,, dentro de la ZEPA (Zona Especial de Protección para las Aves) del mismo nombre y declarada en 2003. Esta zona, parte de la red europea de protección de la naturaleza, incluye la isla de Valdecañas donde se encuentra una urbanización y resort turísticos que los jueces han ordenado derribar.