La unión del pueblo hace la fuerza
“El pueblo unido jamás será vencido” se convirtió hace 50 años en un lema, referente de lucha y resistencia, y hoy, medio siglo más tarde, ha vuelto a cobrar sentido en Extremadura. El ejemplo que nos ha dado la ciudadanía de Salvatierra de los Barros, de toda la comarca de Sierra Suroeste y, en definitiva, de gran parte de nuestra región, nos tiene que hacer ver que, cuando la gente se une por la defensa de un bien común, tiene una fuerza grandiosa que es capaz de ser palanca de grandes cambios.
El archivo del proyecto del macrovertedero por parte de la Junta de Extremadura solo ha sido posible gracias al empuje de la plataforma Salva tu Tierra, que ha conseguido levantar a toda Extremadura contra un proyecto insalubre, que nos condena a ser tierra de sacrificio.
Es una gran victoria ciudadana que nos tiene que servir de ejemplo. Se ha ganado una batalla, pero no aún la contienda final. ¿Y por qué digo esto? Pues porque el gobierno extremeño ha sido cómplice en la tramitación del proyecto de macrovertedero, y lo ha hecho con opacidad, alevosía y alguna que otra irregularidad. Y a los hechos me remito.
En primer lugar, el archivo del proyecto se ha realizado porque la empresa no ha presentado, en tiempo y forma, la documentación requerida por la Junta de Extremadura. Es decir, que el gobierno de Fernández Vara ha publicado el proyecto en el DOE sin que tuviera toda la documentación sobre el mismo.
Es el mismo “modus operandi” que ya han utilizado algunas grandes empresas en esta región, que consideran al Ejecutivo regional como una “administración amiga”, como pasó con la empresa de la mina de litio de Cáceres, a la que se le amplió el plazo para que entregaran toda la documentación que les faltaba.
Otra de las cuestiones que nos hacen desconfiar de cómo se ha realizado la tramitación del proyecto es que se ha intentado ocultar información a la plataforma Salva Tu Tierra. De hecho, no se les facilitó el informe de la sección de residuos que textualmente dice que el proyecto incumple los criterios de ubicación al localizarse en una zona de nacimiento de arroyos, cuyos cauces se pretenden desplazar, obviando que la actuación proyectada se debe adecuar a la naturalidad de dichos cauces y que en ningún caso se debería intentar someterlos a las exigencias del proyecto. ¿No es esto una razón suficiente para rechazar este proyecto? Pues, según la Consejera de Transición Olga García, no. Ni muchísimo menos.
Hay todavía más razones. Es muy llamativo que de los 70 talleres de empleo que se dan en Extremadura, sólo uno está dedicado a la gestión de residuos industriales. ¿Adivinan ustedes donde se imparte desde el año 2019? Pues efectivamente, en Salvatierra de los Barros. Qué casualidad, ¿verdad?
Como ven, hay evidencias de que este proyecto tiene la simpatía de algunos que dicen que no sabían nada pero que llevaban años urdiendo este proyecto a espaldas de su pueblo, pero les ha salido rana. Pensaban que con los 20 empleos de la escuela taller el pueblo se daría por satisfecho, pero qué equivocados estaban. Qué poco conocen al pueblo extremeño, que está cansado de ser considerado una tierra de segunda donde se pueden plantear proyectos que serían impensables en otros lugares. Algún día se dará luz a tanta sombra y aquellos que quisieron vender a su pueblo serán castigados.
Nosotras sí que lo tenemos claro. Desde Unidas por Extremadura nos comprometemos a que el ‘No al macrovertedero’ estará en nuestro programa electoral, por una razón muy sencilla, porque creemos en una Extremadura limpia, digna, de futuro, que no se resigna y que vela por el bienestar de sus vecinos y vecinas. Ahí, siempre, nos encontraremos.
No al Macrovertedero, sí a la vida.
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