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Nos pasamos el día en WhatsApp para no pensar (pero no es culpa suya)

A la mayoría de los participantes en el estudio no le gustaba estar ociosos

Hoja de Router

Las opciones a la hora de disfrutar de nuestro tiempo libre se multiplican. Incluso en solitario, es fácil entretenerse viendo una película, navegando por internet o charlando por WhatsApp. Un grupo de investigadores de la Universidad de Virginia (EE.UU.) ha demostrado que las personas prefieren hacer cualquiera de estas cosas, y otras incluso menos agradables, que pasar unos minutos escuchándose a sí mismas.

El trabajo, publicado en la revista ‘Science’, incluye los resultados de 11 estudios en los que participaron 729 personas, desde estudiantes de facultad a mayores de 70 años. Todos tuvieron que estar a solas durante un periodo de tiempo que iba de seis a 15 minutos: algunos permanecieron en un laboratorio o una habitación y otros lo hicieron en sus propias casas.

Después, se les preguntó cuál había sido su experiencia. Como no era de extrañar, la mayoría preferían escuchar música o utilizar su móvil, y muchos de los que se quedaron en su domicilio confesaron haber hecho trampa. Además, varios tuvieron que ser eliminados del estudio. Entre ellos, uno por escribir una lista de tareas y otro por hacer papiroflexia con un trozo de papel.

A la vista de los resultados, los científicos fueron un poco más allá, y les ofrecieron la posibilidad de recibir una pequeña descarga eléctrica. Parece imposible, pero sí: hubo quien, incluso después de haberla probado, optó por apretar el botón con tal de no estar ocioso. Concretamente, seis de las 24 mujeres y 12 de los 18 hombres a los que se les brindó esta posibilidad. Según los investigadores, la diferencia entre sexos se debe a que ellos buscan sensaciones con más vehemencia que las féminas.

“Es asombroso que ni siquiera a los ancianos les apeteciera estar simplemente pensando”, afirma Timothy Wilson, uno de los autores. El psicólogo cree que esta reacción generalizada no se debe a la gran cantidad de dispositivos electrónicos que utilizamos, sino que, al contrario de lo que pueda parecer, ellos son precisamente una respuesta a la necesidad de las personas de estar continuamente entretenidas.

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Imagen principal: Peter

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