El PSOE de Castilla y León firma una falsa unidad tras el caso de Ponferrada

El PSOE de Castilla y León logró el jueves una foto que deseaba, que anhelaba después de autorizar la moción de censura en Ponferrada. Para hacerse con esta Alcaldía, los socialistas pactaban con Ismael Álvarez, el que fuera alcalde ponferradino y que tuvo que abandonar el cargo tras ser condenado por acoso sexual, el que perpetró contra su concejala Nevenka Fernández. Por ese pacto, Álvarez se comprometió a dejar la política municipal.

La foto de unidad ha sido un deseo. Pero la realidad es que es un gigante con pies de barro, pues la unidad nació resquebraja.

Un portavoz en las Cortes de Castilla y León, que a la vez es el número dos del PSOE nacional. Un secretario del PSOE de Castilla y León que no es nada en las Cortes regionales. Una moción de censura del PSOE de Ponferrada, acordada con un concejal que fue condenado por acoso sexual. Un acuerdo del que nadie dice saber nada, pero que todos lo conocían.

Con todos estos ingredientes se ha fraguado una crisis en el PSOE de castilla y León que ha salpicado incluso a Alfredo Pérez Rubalcaba. Una crisis que, según la versión oficial, se zanjó el jueves por la noche. Pero una crisis, que según fuentes internas que no quieren identificarse, que va a dejar heridos de pronóstico complicado.

Óscar López es el portavoz socialista en las Cortes de Castilla y León y fue, también, el responsable del partido en esta región hasta que Alfredo Pérez Rubalcaba le nombró secretario de Organización. En ese momento decidió dejar la dirección regional del PSOE y centrarse en la federal, aunque mantuvo la portavocía en las Cortes regionales.

En ese momento, un congreso regional del PSOE aúpa a Julio Villarrubia al cargo de secretario regional. Y a partir de ahí, la bicefalia lo único que ha traído, a las huestes socialistas, son problemas.

Villarrubia llega a acuerdos con el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, sin que Óscar López los conozca, pese a que será él el que se enfrente con el dirigente del PP en las Cortes regionales.

Y, encima, llega el portavoz del PSOE en Ponferrada, uno de los municipios más grandes de Castilla y León, Samuel Folgueral, y pacta con Ismael Álvarez, un ex condenado por acoso sexual y ex alcalde del PP, para desbancar al regidor ponferradino, Carlos López Riesco.

Este galimatías ha llevado a la picota a Óscar López porque lo sabía y no impidió esta moción de censura, debatida el día de la mujer trabajadora. Y el que había salido limpio era Julio Villarrubia.

Sin embargo, en la reunión de la ejecutiva regional del jueves por la noche, lo ocurrido en su interior y silenciado por sus miembros ha sido lo contrario. El más discutido, Villarrubia. El más apoyado, Óscar López. La mayoría de sus miembros han aceptado las disculpas de López: no fue consciente de lo que podía ocurrir, dicen los que le han oído lamentarse.

Estas diferencias pudieron llevar a la emoción al número tres del PSOE nacional y a las voces al número uno de los socialistas regionales.

Fuentes del PSOE en Castilla y León han señalado que Óscar López volvió a pedir disculpas por permitir esa moción de censura, que estaba produciendo “un daño terrible al partido”. También han indicado que, de forma emocionada, dijo que no había visto “la trascendencia de lo que ocurriría”.

El último intervenir fue Julio Villarrubia, aunque en diferentes momentos ya lo había hecho, y no siempre de buenas maneras. De forma enojada, incluso con voces, pidió que no se le tenía que “obligar a defender públicamente a Óscar”, aunque posteriormente lo tuvo que hacer, al final de la reunión.

Y dijo que todo el enfrentamiento se debía a una “operación de acoso y derribo” hacia él. En otro momento de su intervención recordó, en voz demasiado alta, que allí mandaba él.

Algunos miembros le reprocharon que pese a decir que Villarrubia no sabía nada, enviara un mensaje al móvil de Samuel Folgueral, dándole ánimos a continuar, según ha publicado un medio de León. Entonces, ¿lo sabía o no? ¿conocía o no la moción de censura?

A la vista de lo ocurrido el jueves en Valladolid, en la sede del PSOE regional, Julio Villarrubia ha quedado desautorizado. Y Óscar López apoyado, pese a que todos reconocieron “la metedura de pata”.

Ahora bien, Óscar López ha pedido unión para evitar los ataques del PP, que han continuado. Incluso el portavoz de los populares en las Cortes regionales ha pedido la reprobación del secretario de Organización del PSOE.