El Lexus RX se pone al día con mejor conectividad e iluminación
Uno de los SUV de lujo más emblemáticos y veteranos del mercado, el Lexus RX, acaba de recibir una serie de actualizaciones que buscan ponerlo al día para hacer frente a una competencia que crece cada día. Lanzado en 1998, el todocamino japonés alcanzó su tercera generación en 2016, cuando comenzó a venderse exclusivamente en versión híbrida, y el año pasado incorporó una variante alargada y con siete asientos. Ahora, tanto esta como la convencional adoptan novedades estéticas y de equipamiento que mejoran en especial su conectividad, seguridad e iluminación.
Por lo que respecta al exterior, los diseñadores de Lexus han retocado el paragolpes delantero, ahora más fluido, y el trasero. Los faros led presentan unos rasgos más finos, en tanto que los grupos ópticos posteriores lucen un motivo en forma de L. Los clientes tienen a su disposición nuevas llantas y más colores de carrocería para elegir.
Sin duda uno de los mayores avances de los RX 450h y 450 L (de siete plazas) es una conectividad que hasta ahora dejaba bastante que desear, sobre todo en comparación con la de sus rivales. El coche estrenará, cuando se ponga a la venta en otoño de este año, plena compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, así como un nuevo sistema de infoentretenimiento que se gestionará por medio de una pantalla táctil de grandes dimensiones.
El control adaptativo de las luces de carretera (AHS) dispone ahora de un complejo dispositivo, denominado BladeScan, por el que las luces led de los faros inciden sobre dos espejos en forma de palas que giran a gran velocidad y las transfieren a una lente para iluminar la vía. El sistema sincroniza la rotación del espejo de pala y enciende y apaga los grupos ópticos de manera que la luz se distribuye de forma más precisa y llega a zonas que suelen ser difíciles de ver con unas largas convencionales, como los arcenes de la carretera.
Además, permite al conductor detectar a los peatones y reconocer las señales de tráfico mucho antes, todo ello sin interferir en la visibilidad de quienes conducen en sentido contrario. El reconocimiento nocturno de peatones se ha mejorado hasta alcanzar los 56 metros de visibilidad frontal, por los 32 metros que ofrecía el dispositivo de la generación anterior.
En el RX 450h L, los asientos de la tercera fila cuentan con dos posiciones distintas, y sus ocupantes disfrutan de más espacio para las piernas, suponemos (pues Lexus no lo especifica) que a costa de perder cierta capacidad en el maletero, que en el modelo actual es de 211 litros con todas las plazas ocupadas. La segunda fila también se ha reconfigurado para incluir asientos Capitán, que añaden 95 milímetros de espacio para las piernas de los pasajeros del fondo y les proporcionan una sensación de mayor desahogo.
El chasis gana en rigidez al incrementarse el número de puntos de soldadura y emplearse adhesivos de alta resistencia. Para que la conducción resulte más precisa, Lexus ha modificado las barras estabilizadoras de ambos ejes, mejorado el control de estabilidad con el fin de reducir el subviraje (la tendencia de un coche a seguir recto al afrontar una curva) y montado unos amortiguadores que controlan mejor los movimientos de la carrocería.
No se esperan novedades en el sistema de impulsión de los RX 450h y 450h L, compuesto hasta el momento por un motor de gasolina de seis cilindros y dos propulsores eléctricos que rinden en conjunto 313 caballos de potencia, a lo que se agrega una batería de hidruro de níquel.
