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Los psiquiatras piden una subida del precio del alcohol para frenar su consumo

Botellas de licor en la estantería de un bar.

Eduardo Azumendi

Reducir el consumo de alcohol, especialmente entre los más jóvenes, es uno de los objetivos de la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental. La crisis económica ha conllevado un aumento de los transtornos mentales, como la ansiedad y la depresión, y el consumo de alcohol y su facilidad para adquirlo es un elemento que puede agravar alguna de estas dolencias. El presidente de la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental, Miguel Roca Bennassar, ha realizado esta propuesta en el marco del XXIII curso de actualización en pisquiatría que se celebra en Vitoria. Bennassare inauguró el curso con una conferencia sobre la relaicón entre la crisis económica y la salud mental.

Además de subir los impuestos al alcohol (al estilo de lo que ha planteado el Colegio de Médicos de Londres para Inglaterra), Bennassar abogó por intensificar la preparación y los medios con los que cuentan los médicos de los servicios de Atención Primaria para atender a la población de riesgo. “Los sistemas de detección precoz de estas enfermedades en Atención Primaria son muy sencillos. Deben ir acompañados de protocolos porque la prevención en este tipo de patologías es claramente eficaz”. También resaltó la conveniencia de modificar la actual política informativa sobre el suicidio, donde se tiende a acallar. “Hay que apostar por un nuevo abordaje y por una información más normalizada”. La relación del suicidio con la crisis económica y su aumento o no es una cuestión que trae de cabeza a los especialistas. “Lo que no vamos a hacer es contribuir a la confusión. Los datos sobre suicidios apuntan hacia una estabilización”.

Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), reflejan un total de 181 suicidios en Euskadi en el año 2013, apenas dos más que en 2007, el año anterior a la crisis. “En general las cifras se mantienen, aunque es posible que algún tipo de subgrupo, como el de hombres en edad de trabajar, haya podido aumentar”, apuntó el experto.

Lo que sí aseguró es que los trastornos del estado de ánimo han aumentado (aproximadamente un 19% en España) entre 2006 y 2010, pero no las patologías mentales más graves. “El desempleo es el factor fundamental para que crezcan este tipo de transtornos. El consumo de psicofármacos también ha crecido durante la crisis”.

Bennassar reclamó mayor atención e inversión pública por parte de las instituciones para el tratamiento de las enfermedades mentales. El aumento de pacientes depresivos, ansiosos y consumidores de alcohol, principalmente entre los desempleados, unido a la reducción de los servicios asistenciales, los “recortes” en la sanidad pública española y la “falta de paridad” de las enfermedades mentales con otro tipo de patologías médicas está afectando a la atención de este tipo de pacientes, ha denunciado este psiquiatra.

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