“Andalucía puede medirse con Madrid, Cataluña y Baviera”: el Gobierno de PP y Cs hace suya la 'herencia recibida' del 28F

“El 28 de Febrero es sobre todo el día de los andaluces que lo están pasando mal, de los que no encuentran empleo, de las que sufren la violencia de género y de los más vulnerables”. Con estas palabras, dentro de un discurso reivindicativo, el primer presidente de centro derechas de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, se mimetizó con la “herencia recibida” de los gobernantes que le precedieron -todos socialistas- y que esgrimieron el 28F contra la herramienta política más potente frente a la España asimétrica, la España de dos velocidades, los agravios del Gobierno central y la tentación de privilegiar a Cataluña y Euskadi.

Andalucía celebra este viernes el día en que sus ciudadanos votaron en referéndum que “no querían ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie”. Este lema se ha repetido durante los últimos 40 años, desde aquel 28 de febrero de 1980, en el que los andaluces reclamaron una autonomía plena por la vía rápida -a través del artículo 151 de la Constitución-, la que habían usado Cataluña, País Vasco y Galicia. El 28F fue un acto reivindicativo en el que Andalucía tuvo que levantar la voz, porque los planes del Gobierno central -entonces dirigido por Adolfo Suárez (UCD)- eran otros: dejar a Andalucía atrás, en el segundo vagón de esa “España a dos velocidades”.

Cuatro décadas después, el planteamiento inicial no ha cambiado un ápice. La conquista del Estatuto andaluz -renovado en 2007 a imagen y semejanza del polémico Estatut catalán- está siendo revisionada desde la crítica más descarnada: son muchas voces, incluido el actual Gobierno, que pone en duda que esa conquista legal se haya traducido en un verdadero cambio sociológico. El órdago independentista catalán lleva tres años marcando la agenda del 28F. “Andalucía nunca le ha fallado a España y tampoco le va a fallar ahora. Está en condiciones de medirse con Madrid, Cataluña e incluso Baviera en Alemania, pero si tenemos las mismas herramientas que ellos”, avisa Moreno, en velada crítica al Gobierno de Pedro Sánchez. Y añade: “Andalucía tiene un Gobierno firme que no va a tolerar ningún trato desigual. Lo exigiremos en todos los órdenes y hasta las últimas consecuencias”

Este año, el primero que organiza plenamente un Ejecutivo andaluz de centro derechas, tiene la cacofonía del 40 aniversario. Las voces se han hecho más sonoras contra el Gobierno de Pedro Sánchez y su trato preferente y bilateral con Cataluña, a través de los partidos independentistas, con Euskadi, a través del PNV, formaciones que tienen que apoyar sus Presupuestos Generales y garantizar la estabilidad de la legislatura. La historia se repite 40 años después. La gobernabilidad de España está condicionada por el eje Cataluña-Euskadi y eso ha influido en la fiebre andalucista que ha contagiado a todos los grupos del Parlamento andaluz, excepto Vox, que este viernes se ha automarginado en una pequeña plazoleta de Sevilla para leer un manifiesto en contra del Estado de las Autonomías.

El presidente usó como vehículo de su discurso el nombre de los premiados con las Medallas de Andalucía, cargando contra los tópicos arraigados sobre el andaluza.  “Es necesario desterrar los arquetipos que durante siglos se nos han atribuido injustamente y que, aún hoy, nos hacen un enorme daño. El tópico es la tumba de la imaginación, nos atenaza y nos condena. Los tópicos se rompen cambiándolos, no diciendo que queremos cambiarlos”, dice Moreno. El discurso del líder andaluz destila continuismo emocional y reivindicativo que tenían los discursos de Susana Díaz, de José Antonio Griñán o de Manuel Chaves, pero Moreno quiere dejar claro que hay un ante y un después. Por eso habla de “una nueva Andalucía”, de la mano de “un Gobierno del cambio”. En esa línea, no olvidó lanzar dardos al PSOE. “Queremos ser lo que fuimos, sí, pero nunca vivir de lo que fuimos”, advierte. “Que nadie piense que concebimos igualdad como conformismo”, añade.

La entrega de las Medallas de Andalucía, máxima distinción que otorga la Junta, han recuperado todo el simbolismo del 28F con un movimiento político muy hábil. El Ejecutivo de PP y Ciudadanos ha creado una nueva distinción, la medalla Manuel Clavero Arévalo, que lleva el nombre del ministro andaluz del Gobierno de Suárez que dimitió para defender el sí al Estatuto de Autonomía contra el criterio de su gabinete. El galardón lo recibe, cerrando el círculo de ese simbolismo, el primer presidente autonómico, el socialista Rafael Escuredo, figura clave en la lucha por el autogobierno pleno de Andalucía. Hace 40 años, Escuredo se recorrió la región en coche, pueblo a pueblo, sumando síes al proyecto autonomista, hizo huelga de hambre para agitar las conciencias y doblegar el rechazo del Gobierno central. “La autonomía la ganó una inmensa mayoría de andaluces que creyeron y siguieron a idealistas como Clavero o Escuredo”, advierte el presidente de la Junta.

Medallas 2020

La Junta ha distinguido con el título de Hijos Predilectos de Andalucía al periodista y escritor Antonio Burgos y al torero Curro Romero. Burgos hizo un discurso muy personal, bajo el título El orgullo de ser andaluz, que repasó varias estampas tradicionales de la comunidad y culminó con el grito ¡viva Andalucía, viva España!

Las medallas han recaído este año en la catedrática especialista contra la violencia de género María Castellano Arroyo en la categoría de Ciencias Sociales y Letras; el actor Antonio de la Torre y la cantante Vanessa Martín en la categoría de Artes; el futbolista Joaquín Sánchez en la categoría de Deportes; el consejero real de Marruecos y copresidente de la Fundación Tres Culturas André Azoulay en la categoría de Solidaridad y Concordia; la ingeniera y catedrática Montserrat Zamorano Toro en la categoría de Mérito Medioambiental; y Ana Bella Estévez, que preside la fundación del mismo nombre en apoyo a víctimas de la violencia de género, en la categoría de Valores Humanos.

Como instituciones que reciben la Medalla de Oro de Andalucía figuran la Real Maestranza de Caballería de Sevilla en la categoría de Solidaridad y Concordia; la comercializadora andaluza Verdita en la categoría de Economía y Empresa; el Instituto de Astrofísica de Andalucía en la categoría de Investigación, Ciencia y Salud; el Salón Internacional del Caballo (Sicab) y la Real Sociedad de Carreras de Caballos de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) en la categoría de Proyección de Andalucía; y la Legión Española en la categoría de Valores Humanos.

Como cada año, mientras el acto oficial del 28F se celebraba en la Maestranza, miles de personas se manifestaron por las calles de Sevilla convocados por la plataforma Caminando/Marchas de la Dignidad y apoyada por el grupo Adelante Andalucía con el lema 'La Andalucía que no se resigna y lucha, a la calle. Pan, trabajo, techo, dignidad'. La marcha ha contado con unas 5.000 personas, según fuentes de Podemos Andalucía.