Un hotel 'low cost' en el lugar del fusilamiento de Torrijos

En el lugar donde Torrijos y sus 48 compañeros cayeron fusilados, que antes era playa, hoy apenas hay nada que recoja el hito. Una placa recordaba ese punto hasta hace unos meses pero ahora la han cubierto. Esto evita que sea pisoteada por los camiones que cimientan el estrecho solar.

En esta parcela, que no medirá más de diez metros de ancho, el Ayuntamiento de Málaga y una constructora pretenden levantar 35 viviendas de protección oficial y un hotel low cost de 148 habitacioneslow cost, con una altura de siete plantas. Los nuevos edificios quedarían a unos siete metros de las terrazas y ventanas de las casas ya existentes. Francisco Pomares, concejal de Urbanismo, explica que la obra es legal y ha sido estudiada a fondo por los técnicos: “Está planteado así y se va a ejecutar así”.

Los vecinos de esos bloques, integrados en una asociación, se han movilizado porque creen que les van a oscurecer la casa y los van a dejar encerrados, generándoles incluso problemas de seguridad en caso de incendio. Son seis portales, con 80 viviendas, cuyos vecinos llevan años denunciando que las previsiones urbanísticas para ese solar son ilegales, que fueron pactadas sin tener en cuenta la situación de sus viviendas y que carecen de cualquier sensibilidad. Basta echar un vistazo desde sus terrazas para entender que van a quedar encajonados. “Nos van a encerrar como en Carabanchel”, lamenta Celia Sanz, presidenta de la asociación.

Luego está la cuestión histórica. Hace unos años, Esteban Alcántara, historiador y secretario de la Asociación Torrijos 1831, explicaba con dificultad a eldiario.es/Andalucíacuál era el lugar dónde cayó el héroe liberal y sus fieles traicionados. Allí apenas había una placa oscura que pasaba desapercibida. Al lugar de fusilamiento le van a plantar ahora un hotel low cost.

El lugar exacto donde fueron fusilados los héroes traicionados que quisieron acabar con el reinado de Fernando VII se desconoció durante décadas.La cruz con la que se señaló el lugar en 1835 fue trasladada, se ganó terreno al mar y se modificó el trazado de las calles, así que durante muchos años el hito se desvaneció, perdido en una parcela que albergó unos corrales que servían de aliviadero, y después un aserradero, en mitad de un barrio de mala muerte.

Fue el propio Alcántara quien mapeó el terreno y, basándose en documentos históricos, dio con el lugar exacto, que antes era playa y aparece reflejado en el icónico cuadro de Antonio Gisbert que puede contemplarse en el Museo del Prado. Cuando lo encontró, el Ayuntamiento colocó una placa que recordaba discretamente el evento: “En este lugar exacto fueron fusilados el día 1 de diciembre de 1831 el general José Mª Torrijos y sus 48 compañeros en defensa de la libertad”. Ese lugar, ignorado durante años, va a servir de zona de paso a un hotel low cost. No es el único lugar históricamente maltratado en la ruta que recorrieron los desafortunados revolucionarios.

Una permuta provechosa 

La historia de cómo un antiguo aserradero acabó siendo un terreno parte del Ayuntamiento y parte propiedad de Sociedad Azucarera Larios (SALSA), el grupo inmobiliario que gestiona el patrimonio de los herederos del Marqués de Larios, es compleja. La parcela es un sobrante del proyecto de reparcelación. SALSA se hizo con ella mediante una permuta por los terrenos cedidos para un colegio, que pasaron a titularidad pública. Los terrenos del colegio acabaron siendo la avenida Ingeniero José María Garnica, que articula el tráfico de la zona.

En el acuerdo que pone fin al expediente de expropiación de 27 de julio de 2004 se contempla que SALSA permuta 2.691 metros de su propiedad (ocupados por un colegio de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl) por 1.810 metros cuadrados también para uso colegial, más 421 metros cuadrados de “aprovechamiento urbanístico lucrativo”, y el pago de 202.566,12 euros. El dinero debía abonarse por el Ayuntamiento a la congregación religiosa para compensarla por cuatro aulas, un gimnasio y una caseta de servicios, todos prefabricados.

En 2005 se firmó el proyecto para el hotel y las VPO, pero quedó paralizado por la crisis económica. Ahora se reactiva de la mano de Maconext Hospitality, una sociedad anónima constituida en mayo de 2017 que adquirió los terrenos a SALSA. La nota simple registral contempla un solar edificable para el hotel de 491 metros cuadrados (421 metros cuadrados de aprovechamiento), mientras que el terreno para las VPO es de 565 metros cuadrados. Un camión de bomberos tendría muy difícil maniobrar en el hueco que quedaría entre fachadas, pero el proyecto sigue adelante porque las fachadas no se consideran principales y porque se sigue el planteamiento de “manzana cerrada”. 

La manzana cerrada, clave en este asunto, estaba prevista cuando no se había ejecutado el vial, de modo que el “edificio gemelo” llegara hasta mitad de la avenida. Los vecinos enseñan los porteros automáticos de la fachada, que demostrarían que es principal. Es de ladrillo visto y no parece un patio interior.

Según el concejal Pomares, las protestas llegan tarde. “Han tenido 20 años, ¿y se ponen a alegar cuando está la obra?”, se pregunta. “Lo puedo entender humanamente, que tienen su casa y les van a tapar las vistas, pero la legalidad es la legalidad. Eso sí: salvo que un juez diga lo contrario”, comenta a eldiario.es/Andalucía.

Para el concejal, el interés general justifica la posición del Ayuntamiento. “¿El dueño de la parcela privada qué nos va a decir? Que si no quieres que construya, ”cómprame la parcela“. Venir al Ayuntamiento a que con el dinero de todos haga que no les tapen…”, explica el concejal, para quien la situación se ha dado en otros lugares, y más con la reactivación inmobiliaria. “Han disfrutado muchos años de no tener a nadie delante. Se han tirado durante la crisis disfrutando de las vistas”, opina Pomares.

Los vecinos han acudido al Defensor del Pueblo, que ha preguntado al Ayuntamiento por qué no se dio traslado a los vecinos del estudio de detalle. También han interpuesto una querella ante la Fiscalía, que aún no se ha pronunciado. En el Pleno de mayo, el Ayuntamiento aprobó, por 13 votos contra 12 y dos abstenciones, una moción planteada por Málaga Ahora, en la que se insta al equipo de gobierno a revisar el planeamiento, calificando el terreno para uso de parques y jardines; conceder acceso al expediente completo a los vecinos, aceptándolos como parte interesada; y suspender las licencias de obra ya expedidas.

¿El equipo de gobierno va a cumplir la moción? “No”, responde tajante Pomares, que asegura que la licencia, un acto jurídico, está por encima de la voluntad política del Pleno. “Urbanismo le dirá al Pleno que lo que pide no lo puede hacer porque es ilegal”.

La cuestión histórica tampoco parece hacer mella en el equipo de gobierno. Pomares cree que se abusa de la figura de Torrijos por un interés particular. Para el concejal, “no ha lugar a hablar de Torrijos cuando su espacio de homenaje es el refectorio del Convento de San Andrés”, donde pasó su última noche y que ha sido rehabilitado recientemente con fondos municipales.

Los vecinos piden que el solar se aproveche para unos jardines o un parque, donde se recuerde adecuadamente la figura del héroe.