Seis mensajes de Susana Díaz a Rajoy (y al PSOE) en su discurso de fin de año
- Las circunstancias políticas del país y del Partido Socialista convierten en inevitable la interpretación en clave nacional del discurso de fin de año de Susana Díaz como presidenta de la Junta de Andalucía.
Las circunstancias políticas del país y del Partido Socialista convierten en inevitable la interpretación en clave nacional del discurso de fin de año de Susana Díaz como presidenta de la Junta de Andalucía. Además de aparecer con su perfil institucional, no cabe duda de que Díaz ha lanzado mensajes nacionales con un destinatario prioritario: Rajoy y el Partido Popular.
No obstante, lanzar mensajes a Rajoy es un mensaje en sí mismo, que quiere situar a la secretaria general del PSOE andaluz como voz autorizada en su partido frente a un Rajoy al que quiere colocar como enemigo y rival, y hacer olvidar la jornada de investidura en la que el PSOE con su abstención permitió su Gobierno. Como también quiere hacer olvidar el mensaje reiterado de Rajoy por situar al PSOE como actor colaborador durante la legislatura. Y sin duda, sus palabras están en la línea de proyección nacional de cara a una previsible candidatura a liderar el PSOE; una línea que lleva trazando de forma estudiada en estos meses tras la crisis socialista sin rematar, que se arrastra desde el Comité Federal de octubre.
Estos son los mensajes a Rajoy que se pueden desprender del discurso de la presidenta andaluza, enfocados sobre todo a pintar un perfil de defensora de derechos y oposición.
Doñana. “El Gobierno andaluz estará vigilante para que los andaluces y andaluzas de hoy, y las generaciones venideras, sigan disfrutando del enorme patrimonio natural que es Doñana”.
El lugar elegido para el discurso, Doñana, y sus palabras lanzan un claro mensaje político. Doñana se ha colocado este año en el punto de mira no sólo regional si no nacional, por lo que los ecologistas califican como la amenaza de la instalación de almacenes de gas en el entorno e interior del Parque. En esta crisis ambiental, los partidos de la oposición han sabido sacar cierta delantera en la defensa del espacio natural a los socialistas. Susana Díaz, a través de su discurso y la elección del sitio, ha querido por un lado intentar recuperar el liderazgo en la defensa de este símbolo; y por otro, poner la pelota en el tejado del Gobierno de Rajoy, advirtiendo que el enfrentamiento para Díaz no estará en la región si no que será otro asunto en la mesa de confrontación con el Partido Popular gobernante.
Presupuestos y estabilidad. “En Andalucía tenemos estabilidad institucional. Hemos sido la primera comunidad en aprobar sus presupuestos”. Díaz presume de lo que no puede presumir aún Rajoy. Ha sacado adelante los prespuestos del año y mantiene un socio estable en Ciudadanos, mientras que el presidente, como ha reconocido, aún tiene que cuadrar acuerdos para cerrar los prespuestos de 2017 y, debido a la aritmética del Congreso, la facilidad para sacar propuestas adelante no la tiene garantizada.
Derechos de los trabajadores. “Tenemos que seguir trabajando en favor del empleo y también para que los derechos de todos los trabajadores, duramente castigados en los últimos años, sean restablecidos”. Una vez más, Susana Díaz quiere situarse a sí misma como portavoz y defensora de derechos frente a los recortes de los últimos cuatro años de Rajoy. En este caso, en materia de empleo, en la línea del PSOE con la presentación de la proposición no de ley para derogar la reforma laboral.
Pensiones. “Las personas que cuidan a dependientes, mujeres en su inmensa mayoría, han sido quienes en primer lugar fueron expulsadas del sistema, arrebatándoles el derecho a cobrar una pensión. Y este año vamos a pelear para que les devuelvan este derecho. También tenemos que garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones en su conjunto. Y, por supuesto, garantizando que las de viudedad permanezcan en la Seguridad Social”. Es verdad que las CCAA tiene campacidad para complementar las pensiones, pero el debate actual y nacional habla de la recuperación de la hucha de las pensiones y de la posibilidad que ha barajado el gobierno del PP de sacar las de viudedad de la Seguridad Social. Como ya hizo hace apenas un mes, Díaz se postula como respaldo a las viudas y reitera el mensaje de recuperación de derechos.
Sanidad. Además de volver a reconocer los “errores” cometidos, en clara referencia a la fusión hospitalaria, Susana Díaz apostilló que la sanidad andaluza es una sanidad “que no excluye a nadie”. “Debemos estar muy atentos a quien busca excusas para implantar un modelo con el que hacer negocio que, como hemos visto, siempre acaba en copagos, privatizaciones, cierres de hospitales y despidos a mansalva”. En su tarea de armar una imagen de defensora de derechos y del estado de bienestar, la Sanidad no podía quedar excluida y el dardo a las medidas que han dejado fuera a miles de inmigrantes de la cobertura sanitaria y al cambio de modelo en la gestión sanitaria del Partido Popular tampoco.
Debate territorial. Y por último, no podía faltar el punto de vista de la presidenta en el debate territorial que se avecina más pronto que tarde. Es verdad que Díaz ha repetido una frase que han utilizado todos los presidentes de la región desde la creación de la España Autonómica: “Andalucía no quiere ser más que nadie, pero tampoco va a aceptar ser menos”. Sin embargo, en un momento como el actual sin duda ha lanzado su idea territorial de “unidad” “compatible con la diversidad, que es nuestra gran riqueza y además nos permite construir un país más atractivo en derechos, libertades y oportunidades” marcando orientación para su partido.
Por si quedaba alguna duda, la frase utilizada por la presidenta andaluza para rematar el año en la que aseguraba que “España tiene futuro” no estaba dirigida, es evidente, a los andaluces si no a todos los españoles.