Unicaja anuncia un plan de ajuste que supondrá reducir un 20% los gastos de personal
La primera entidad financiera de Andalucía, Unicaja, prepara un plan de ajuste que supondrá una reducción del 20% en el gasto de personal, con el objetivo de ahorrar unos 50 millones de euros. El jarro de agua fría lo recibieron este martes los trabajadores de la única entidad financiera que no había sido sometida hasta el momento a un proceso de reestructuración. La reunión de la mesa de relaciones laborales puso las cartas sobre la mesa: la dirección reconoció que hay que recurrir a despidos, que se intentará que sean lo menos traumáticos posibles, y los representantes de los trabajadores están dispuestos a negociar, pero conociendo todos los datos y sin que todo el sacrificio recaiga sobre la plantilla.
Fuentes de Unicaja han confirmado que existe “total voluntad de negociar con los representantes de los trabajadores”, pero han matizado que este plan de ajuste se hace necesario para adaptarse a “un entorno financiero complejo”, no solo por la situación de crisis, sino también por los cambios normativos que “son mucho más exigentes”. Las mismas fuentes ha precisado que “se perfilarán las fórmulas y las medidas que se deberán tomar para lograr ese ahorro”, que no solo tendrá que hacerse con el recorte en la plantilla, si bien no han aclarado qué otras medidas adoptarán “porque la negociación acaba de empezar”. De hecho, la próxima reunión está prevista el día 25 de septiembre. Eso sí, han descartado que sea por mandato de Bruselas o que la entidad financiera se encuentre en proceso de disolución.
Desde el sindicato CCOO han criticado que la empresa se justique “en vagas amenazas sobre la situación del sector en el futuro” o en las medidas adoptadas por “el Gobierno de España o la UE”, por lo que han exigido “datos y seriedad en la negociación”. Los sindicatos están dispuestos a asumir el coste si es necesario, pero sobre la base de que los despidos deben ser prejubilaciones. “Cualquier plan de ajuste debe respetar los principios de voluntariedad, universalidad y compensación”, manifiesta el sindicato en un escrito recogido por la agencia Europa Press.
La sangría del sector
Con este anuncio continúa la sangría en la banca. De hecho, según un estudio de CCOO, la reestructuración del sector financiero ha tenido en Andalucía un impacto en el empleo que ha supuesto casi 6.000 puestos de trabajo desde que empezó la crisis (2008), es decir, un 15%, aparejado al cierre de 1.036 oficinas hasta 2012. Eso sin que se haya resuelto el problema del flujo de crédito para la economía y las familias.
Los datos recabados por esta organización destacan sobre todo la destrucción de empleo con el desembarco de CaixaBank (2.053), seguida por el plan de ajuste en BMN (664) y la reestructuración de Cajasur (otros 645). Otras entidades financieras que han reducido significativamente sus plantillas en Andalucía entre 2008 y 2012 han sido BBVA (230 empleos menos), Santander (166), Popular (299), Banesto (215), Sabadell (250) y Bankia (183).
