Huesca es diferente: Vox condena la violencia contra la mujer y el PSOE encuentra apoyos en Ciudadanos
A contracorriente de la política nacional parece conducirse la gestión local en Huesca: Vox condena la violencia machista y el gobierno del PSOE desarrolla un proyecto del PP con apoyos más o menos velados de Ciudadanos. Todo ello, en una ciudad de solo 52.000 habitantes cuya atmósfera se encuentra entre las más contaminadas de España. Y en la que se entregan los premios Porc d'Or, los 'Oscar' del porcino, mientras en la calle se organiza una protesta contra la ganadería intensiva. Convive en la contradicción la única de las tres capitales aragonesas con un gobierno progresista, merced del ya famoso voto en blanco sin dueño que permitió la investidura de Luis Felipe.
En una línea opuesta a la de Vox, y en contradicción con su postura en otros consistorios del país, el concejal Antonio Laborda se sumó la semana pasada a la declaración conjunta con la que el Ayuntamiento de Huesca mostró su repulsa hacia la violencia contra la mujer. Laborda, eso sí, matizó después que en su partido “se habla de otra violencia, la violencia intrafamiliar”. Esto no le impidió leer las primeras líneas del texto en el acto que tuvo lugar en el marco del Día Internacional para la lucha contra la Violencia hacia las Mujeres y que firmaron, además del partido de extrema derecha, PSOE, PP, Ciudadanos y Con Huesca.
El edil de Vox empezó leyendo que “la violencia contra mujeres y niñas es una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas, persistentes y devastadoras del mundo actual sobre las que apenas se informa debido a la impunidad de la cual disfrutan los perpetradores, y el silencio, la estigmatización y la vergüenza que sufren las víctimas”. Se trata de un escrito extraído de la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer aprobada por la Asamblea General de la ONU.
Peatonalización reversible
Huesca también ha sido la ciudad de la peatonalización reversible, con el proyecto finalmente descartado de abrir al tráfico durante el periodo navideño un tramo exclusivamente en horario comercial. La propuesta inicial del equipo de gobierno municipal, sugerida por los comerciantes de la zona, desató de inmediato una tormenta de duración breve. El PP había solicitado una convocatoria urgente de la Ponencia de Movilidad, y los vecinos de las calles Alcoraz y Zaragoza habían anunciado incluso movilizaciones. Ciudadanos, en cambio, la consideraba una “prueba” con la obligación de “hablar con todas las partes antes de ponerla en marcha”.
Y eso que se trataba de una petición de la Asociación de Comercio de Huesca para priorizar el uso del coche en el tiempo de las compras navideñas. Se sustentaba en un informe jurídico, lo que avalaba al alcalde, Luis Felipe, para la firma de decreto sin necesidad de consultar a otros órganos y en otro de la Policía Local sobre la seguridad. La última parte de la peatonalización del centro urbano, iniciada por el PP durante la legislatura 2011-15 y 'aparcado' por los socialistas en los cuatro años posteriores, comprenderá desde la calle de Sancho Ramírez hasta la plaza de Santo Domingo. El presupuesto supera los 1,8 millones de euros y deberá estar concluida en el verano de 2020.