Anaconda Cup de Simond. El piolet de las caras nortes “Pirenaicas”

“Polivalencia” podría ser el adjetivo que mejor defina este producto. Durante unos diez años he estado usando este piolet como única herramienta de alpinismo en todas las ascensiones y descensos extremos que he realizado, desde clásicas guiadas en Alpes como la arista Küffner, hasta la McIntyre-Colton a las Jorasses, o la vía del Pastor a la norte de Peña Forato, incluyendo también las bajadas de la norte del Taillón o la sur del Arriel, entre otras muchas aventuras.

Después de todas estas horas en el banco de pruebas, puedo decir a ciencia cierta que ésta es una herramienta que tiene un gran comportamiento en todos los terrenos en los que la dificultad técnica no sea extrema.

Entre los datos de “laboratorio” nos encontramos con un piolet ligero de unos 560 gr en la versión pala y cerca de los 600 gr en la versión con martillo. Tiene una hoja de banana de acero troquelado que da un buen resultado en todos los terrenos, aunque nos gusta especialmente en el mixto.

El mango de 50 cm, tiene un buen agarre y la aleación de aluminio hace que sea bastante ligero.

Como hemos comentado anteriormente, es en los tramos mixtos de cara norte donde se muestra más competente. La maza es grande y su pegada firme y efectiva. La hoja tiene una abertura circular lo suficientemente amplia para colocarla en el porta material rápidamente en caso de echar las manos a la roca. El regatón es cómodo en el apoyo y clava bien en la nieve dura, pero además tiene un agujero grande para pasar casi cualquier mosquetón. La empuñadura de goma hace que tengamos un buen agarre con menos esfuerzo y las manos más calientes.

En la escalada en cascada es donde quizás tiene más carencias. Su ligereza hace que la pegada no sea todo lo efectiva que nos gustaría, y en tramos verticales largos echaremos de menos un poco más curvatura en el mango y una cabeza con más aplomo.

Hay tres “arreglos” que se le pueden hacer fácilmente este piolet y que harán que mejore bastante en su uso. Primero, limar por ambas partes el regatón para hacerlo más perfilado, con esto conseguiremos que el mango penetre con mayor facilidad en la nieve y se enganche menos en los tramos de roca. Segundo, quitar la dragonera y cortar el aplique, con esto reducimos algo de peso, ganamos en estética, pero sobretodo quitamos un elemento extraño y dejamos el mango liso. Finalmente, perfilar correctamente la parte de arriba de la hoja, con esto conseguiremos sacar el piolet más fácilmente una vez clavado en el hielo.