“Muchas de las canciones de Revólver han pasado el corte de los años y eso no es tan sencillo”
Dos años justos después de su anterior álbum, Carlos Goñi (Madrid, 1961) regresa este viernes 10 de febrero con Capitol, undécimo trabajo de estudio de Revólver, banda que lidera desde hace ya 27 años. “Miro atrás y siento vértigo. A unos les habrá gustado y a otros no, pero le he dado mi vida a esto. He escrito cada nota de lo que ha aparecido ahí”, recalca a Europa Press.
Y añade que se siente “orgulloso” de su trayectoria. “Unas veces mejor y otras he sido peor. La vida no tiene ensayo y yo no me avergüenzo de nada de lo que he escrito. Eso no significa que no me metiera ahora mismo en el estudio a hacer las cosas distintas, pero nada me provoca rubor”, asegura, para acto seguido remachar: “Revólver es un grupo clásico desde el principio”.
“Muchas de las canciones de Revólver han pasado el corte de los años y eso a veces no es tan sencillo. Eso es también lo bueno que tiene ser muy clásico trabajando. Las Ray-Ban y los vaqueros son clásicos, y esas cosas suelen ser atemporales”, explica, para remachar: “Cuando una canción es muy clásica y no está en un determinado tipo de tendencia, lo normal es que los años pasen sobre ella y no le generen grandes desperfectos”.
Acerca de este nuevo paso en particular, Goñi plantea que ha descubierto que tiene “un único libro y cada disco es un nuevo capítulo”. Por eso destaca que nadie puede pretender “que cada álbum sea un libro distinto”: “Para eso tendría que eliminarme y volverme a hacer de nuevo. Cada disco es un capítulo de una historia que es la mía”.
Eso sí, admite que aunque siempre ha dicho “lo que quería”, terminó aprendiendo “algo tarde”, con su disco Mestizo (2004), que a veces lo hizo “más alto de lo que debía”, porque cuando “gritas en exceso la gente termina por taparse los oídos”. “Hay que tener medida para saber cómo de altas dices las cosas, no por nada, sino porque llega un momento en el que puedes resultar un cansino”, reflexiona.
Independencia
Al mirar atrás a la trayectoria de Revólver en términos generales, resulta destacable el abandono de la multinacional Warner Music y su recién adquirida independencia, que Goñi ve así: “Me fui con un contrato encima de la mesa, fue una decisión muy meditada y era necesaria para poder hacer todo lo que estoy haciendo de otra manera”.
“En mi caso, es muy común que tras un disco eléctrico y rockero, el siguiente sea muy acústico, por cuestiones de balance personal”, explica, desvelando ya por donde van los derroteros de este nuevo Capitol, compuesto casi en su totalidad en el hotel del mismo nombre de la Gran Vía madrileña, con vistas a la Plaza de Callao.
Así, revela que la intención con este álbum es que quien lo escuche tenga la “sensación” de que se lo está “tocando poco menos que en la oreja”. “Si lo haces solo con guitarra acústica y voz eso es muy fácil, pero con una banda no es tan sencillo y técnicamente es muy complicado”, indica, explicando que no estamos ante un trabajo en absoluto sencillo.
Pero más allá de cambios de sonido, Goñi remarca que “esta es una de las mejores colecciones de canciones” con las que se ha “topado en muchísimos años”. Esa es la única conclusión que le importa al músico, quien aprovecha, además, para afirmar que Warner siempre le dio “toda la libertad” del mundo: “Yo hago siempre los discos como me salen del corazón”.
Cambios en la banda y gira
Para registrar (y a partir de ya mismo presentar) estas canciones, Goñi ha cambiado “al cincuenta por ciento de la banda”, incorporando a Josué Santos para piano, teclados y saxo, así como fichando a Carlos Sánchez como nuevo batería. Junto a ambos, el propio Goñi y su “mano derecha” Manuel Bagües.
“Las guitarras acústicas suenan espectaculares, a otro nivel”, defiende sobre el resultado de la grabación, que tiene, a su juicio, “un sonido de guitarras que es difícil de comparar con la gran mayoría”. “Hasta que dimos con la clave tardamos unos cuantos días, pero cuando lo logramos nos quedamos alucinados”, subraya.
De cara a la gira, se muestra entusiasmado con la nueva formación de Revólver, al tiempo que manifiesta su deseo de volver a la carretera cuanto antes, para una gira que “acabará en noviembre, más o menos”. Y subraya que salir de gira le gusta “mucho” porque le “fascina tocar”.
“Puedo estar tiempo sin tocar, pero es complicado que esté tiempo sin escribir. Esa es una cuestión que hago casi a diario, unos veces está bien y otros directamente a la papelera Pero salir de gira me gusta mucho. Cuando todo fluye es genial. Además, el concierto empieza cuando nos decimos buenos días por la mañana”, remarca.
No tendrá que esperar mucho, en cualquier caso, pues este mismo 10 de febrero a las 19:00 empieza una gira promocional de firma de discos y showcases en Madrid (El Corte Inglés de Callao, al lado del Hotel Capitol). No es esto la gira de presentación propiamente dicha, pero recorrerá todo el país durante este mes.
Así, tras Madrid será turno para Zaragoza (11 de febrero, Carrefour Augusta), Valencia (12 de febrero, Fnac), Bilbao (13 de febrero, Fnac), San Sebastián (14 de febrero, Fnac), Barcelona (15 de febrero, Fnac Triangle), Murcia (16 de febrero, Fnac), Málaga (17 de febrero, Fnac) y Sevilla (18 de febrero, Fnac). Todas las citas a las siete de la tarde.
La gira como tal arrancará en Barcelona (2 de marzo, Festival Mil.lenni) y seguirá por Valencia (3 de marzo, Moon), Alicante (4 de marzo, The One), Bilbao (10 de marzo, Santana), Zaragoza (11 de marzo, Oasis), Madrid (12 de marzo, La Riviera), Sevilla (23 de marzo, Custom) y Albacete (24 de marzo, Palacio de Congresos y Exposiciones).
Luego visitará Jumilla (25 de marzo, Teatro Vico), Valladolid (31 de marzo, Teatro Carrión), Ponferrada (1 de abril, La Vaca), Córdoba (7 de abril, Sala M100) y Santander (28 de abril, Escenario Santander). Toda la información y las entradas están en la web de la banda.