Vox utiliza un caso de abuso sexual de un joven marroquí mayor de edad para cargar contra el “incremento” de MENAs
Guillermo Pérez-Cosío, concejal de Vox en el Ayuntamiento de Santander, ha pedido al Pleno de la Corporación que apoye su petición de expulsión del país de dos jóvenes inmigrantes, así como expresar una queja a la Consejería de Sanidad por la negativa de un hospital público, al que no citó, de informar en el proceso de tramitación de expedientes de determinación de edad de jóvenes inmigrantes indocumentados.
La moción de Vox no ha prosperado, pero más allá del resultado de la propuesta en sí, la moción puso de relieve una división de opiniones en el seno del equipo de gobierno, que alineó a uno de los socios, Ciudadanos, con el resto de la oposición. La moción de Vox solo contó con el único voto a favor de su propio concejal, Pérez-Cosío, la abstención del Partido Popular y el voto en contra de Ciudadanos, PSOE, PRC y Unidas por Santander.
El portavoz de Vox ha pedido esta mañana que la Junta Local de Seguridad se reúna para valorar “el problema de convivencia” que puede suponer “la presencia en nuestra ciudad de un número creciente de menores no acompañados”.
Para justificar esta petición, Pérez-Cosío ha traído a colación la detención de dos jóvenes este mes en Santander y la condena de uno de ellos, un joven marroquí de 19 años (que no es menor, por lo tanto), a 21 meses de prisión por abuso sexual a una mujer británica a la que se realizaron “tocamientos obscenos” en los Jardines de Pereda.
El portavoz de la formación de Santiago Abascal pidió al Pleno que solicitara a Delegación del Gobierno la expulsión de todos los implicados en el suceso, aunque solo uno ha sido condenado, que es un condicionante para establecer una causa de expulsión en aplicación de la Ley sobre Derechos y Libertades de los Extranjeros en España.
Para el portavoz de Vox existe una “alarma social” en Santander por la presencia de MENAs (menores no acompañados) que se encuentran bajo tutela pública. Pérez-Cosío justificó esta visión de la realidad también con los casos de personas que intentan acceder ilegalmente a los ferries que comunican con el Reino Unido.
“Alarmista y demagógico”
Bien rebatiendo los datos, bien rechazando el trasfondo ideológico de la propuesta, nadie apoyó abiertamente la propuesta de Pérez-Cosío. El conjunto de la Corporación no comparte, en este sentido, lo que se ha calificado de propuesta “alarmista y demagógica”.
Pedro Nalda, concejal de Protección Ciudadana, rechazó que pueda hablarse de alarma social en Santander, precisamente porque los datos no lo corroboran. Según ha explicado al Pleno, la tasa de criminalidad se ha reducido ligeramente respecto a la media nacional. Este rechazo al planteamiento de Vox no se ha traducido, sin embargo, en un voto negativo, sino que el PP se ha abstenido.
Quien votó en contra fue el socio de gobierno, Ciudadanos, cuyo portavoz Javier Ceruti ha dicho que la propuesta “rezuma racismo”, ya que da a entender que “los abusos sexuales los cometen solo los extranjeros”.
La edil socialista Ana Santurtún ha justificado el voto en contra en que la propuesta “crea alarmismo sobre un tema grave y criminaliza a un colectivo”. Ha explicado también que los radiólogos (por el estudio de la edad de los inmigrantes) informan al médico forense que pide su intervención, dando a entender que un servicio hospitalario no tiene por qué informar a nadie más.
José María Fuentes-Pila, portavoz del PRC ha rechazado el contenido ideológico de la propuesta de Vox y ha defendido la garantía de derechos y colectivos como establecen la Carta de los Derechos Humanos y la legislación sobre Protección del Menor.
Miguel Saro, portavoz de Unidas por Santander ha calificado como demagógico el discurso de Vox y ha rechazado que se utilice un caso concreto para establecer una categoría que afecta a un colectivo.
0