Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Aparecen casquillos de bala en la finca donde buscan a cinco represaliados por el franquismo

Restos de casquillos junto a la que se cree es una fosa común de la guerra civil en Los Cerralbos (Toledo)

Bárbara D. Alarcón

0

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) iniciaba este viernes la búsqueda de una fosa común en la localidad toledana de Los Cerralbos (Toledo), concretamente “en una finca situada a un kilómetro del pueblo”, explica en declaraciones a este medio Marco Antonio González, portavoz del colectivo.

En esta nueva exhumación, ARMH busca a cinco hombres que “fueron detenidos extrajudicialmente y asesinados por los franquistas” el 5 de noviembre de 1936, tal y como atestiguan las viudas de los represaliados y los propios vecinos del municpio. “Eso se sabía aunque no hay documentación escrita sobre lo ocurrido porque estamos muy cerca del pueblo”, subraya González. “La familia nos ha contado cómo fueron secuestrados con el pretexto de llevarlos a Talavera de la Reina, pero nunca salieron de Los Cerralbos”.

Los hechos ocurrieron “una vez que entran las tropas golpistas”. “Las viudas lo registraron años después y son las propias familias las que han movilizado” una exhumación con la que se espera encontrar concretamente a cinco toledanos: Teodoro Dionisio Fernández, Lucio Jiménez Fernández, los hermanos Baldomero y Eulogio Díaz Zapata y Pablo Arrogante Alía. Todos ellos eran de Los Cerralbos, a excepción de Arrogante quien nació en la localidad de Lucillos.

“Quien sabe realmente lo que ocurrió son las víctimas y sus asesinos”

ARMH es una organización que lucha por la recuperación de la memoria histórica en toda España. Su llegada a Toledo responde a la petición de las familias de Fernández y Jiménez. “El año pasado Patricia, la bisnieta de Teodoro, se puso en contacto con nosotros. Ella vive en Los Cerralbos, lo que ha agilizado mucho la investigación”, un paso previo a la exhumación clave para concretar la ubicación de las fosas. “Vivir en el pueblo donde se produjeron los hechos abre la puerta de muchos testimonios, en casos en los que ya no hay vinculación no podemos saber que pasó”.

Según González, los trabajos en esta localidad toledana han sido muy ágiles ya que los vecinos y vecinas han colaborado activamente con el colectivo. “Esto suele ser muy complicado porque esta es una zona que fue muy azotada por el Golpe de Estado de 1936. No es fácil que te abran las puertas y cuenten su historia familiar a gente que no es del pueblo”.

La exhumación acaba de empezar y, aunque no se han localizado los restos, Patricia, la bisnieta de Teodoro Dionisio Fernández ha acudido a la finca. “Su abuela, de 87 años, es la hija del desaparecido y lleva toda la vida esperando el momento de poder localizar los restos de su padre para poder darles una sepultura digna”, comparte González, quien reconoce que son los testimonios y la memoria oral de familias como la de Patricia, los que guían el trabajo de la Asociación. “Quien sabe realmente lo que ocurrió son las víctimas y sus asesinos”.

Aparecen los casquillos

Durante las labores de exploración de este viernes han aparecido casquillos de bale. En concreto, tres proyectiles “que evidencian que allí se produjeron disparos. Son la primera prueba que ratifica los testimonios”, apunta el representante de ARMH. “Los propios proyectiles son los que nos van guiando porque los cuerpos tuvieron que quedar en un pequeño radio alrededor”.

Esta es una de las razones por las que tanto las familias como el colectivo se muestran “esperanzados” respecto al éxito de los trabajos. “Los testimonios recopilados dicen que están ahí, que nadie los recogió ni se los llevó al pueblo, además no ha habido maquinaria pesada, ni construcciones”.

Desde su fundación en el año 2000 ARMH ha intervenido en más de 250 fosas comunes, la última de ellas también con éxito y en Castilla-La Mancha. “Fue en Manzanares, donde encontramos a 35 vecinos asesinados en 1940”. Una recuperación de la memoria realizada por personal voluntario que “ponen sus conocimientos y su tiempo al servicio de los familiares de estas víctimas” que, según González, tienen que “autorepararse”. “Este trabajo debería hacerlo el Estado para buscar a sus personas desaparecidas”.

Las labores de búsqueda de la fosa de Los Cerralbos continuarán durante los próximos días bajo la dirección del arqueólogo responsable de la exhumación, Serxio Castro.

síguenos en Telegram

Etiquetas
stats