Castilla-La Mancha consigue cerrar el año rebajando su tasa de paro juvenil
- No obstante, según los últimos datos de la EPA, durante los dos últimos trimestres se perdieron 2.500 empleos de jóvenes entre 16 y 24 años
La cifra interanual de desempleo ofrece buenos resultados pero no así la comparación entre los últimos dos trimestres en el caso del escenario entre los más jóvenes. El paro juvenil continúa siendo una asignatura pendiente para el Gobierno de Castilla-La Mancha, tal y como reflejan los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) con el cierre de todo el año 2016. De esta forma, en la región el número de desempleados entre los 16 y los 24 años ha experimentado una bajada importante de 2.200 personas entre el cierre de 2015 y el pasado mes de diciembre, pero en este colectivo también hubo una subida de desempleados entre los dos últimos trimestres del último año.
Aunque hasta el mes de octubre el desempleo juvenil experimentó tres bajadas consecutivas por semestres, de los 39.400 parados en el último trimestre de 2015 hasta los 35.000 del tercero de 2016, el ciclo se rompió en el tramo final del año, donde el número de parados de esa franja de edad subió hasta los 37.200 (7.800 de 16 a 19 años y 29.400 de 20 a 24 años).
Este aumento los últimos tres meses del año ha provocado que la comunidad autónoma haya vuelto a superar la barrera del 50% en su tasa de desempleo entre los jóvenes. Consiguió ubicarse en el 47,46% en el tercer trimestre del año, pero ha subido tres décimas al cierre del periodo con un porcentaje del 50,84% de paro entre los menores de 25 años. De hecho, en el ranking por comunidades autónomas, ocupa la antepenúltima posición, superada por Andalucía (con un paro juvenil del 57,79%) y por Extremadura (51,99%).
La situación contrasta con los datos a nivel regional, donde el colectivo de desempleados que buscan un primer empleo (entre los que se encuentran los jóvenes) es el que ha determinado, en parte, la bajada del paro en Castilla-La Mancha en todo 2016, sobre todo con el programa del Plan Extraordinario por el Empleo dirigido principalmente a jóvenes.
El cambio de tendencia en otoño
El punto de inflexión que el desempleo juvenil experimentó en otoño también aparece reflejado en los datos del paro registrado del Ministerio de Empleo. El número de desempleados menores de 25 años no dejó de bajar en Castilla-La Mancha desde marzo hasta el mes de septiembre, en el que pasó de 18.103 parados a 19.824. Este ascenso también se dio en noviembre, llegando hasta los 20.063 parados. Solo a final de año, en el mes de diciembre, estas cifras volvieron bajar, situándose el desempleo de este colectivo en las 18.570 personas.
Y con carácter interanual, al igual que sucede con la Encuesta de Población Activa, los datos son globalmente positivos, porque el cierre de 2015 se saldó en diciembre de ese año con 22.500 parados menores de 25 años. Es decir, se ha conseguido bajar en 4.000 personas el desempleo en esta franja de edad durante los últimos 12 meses.
Las continuas oscilaciones en este tipo de datos y el hecho de que Castilla-La Mancha no consiga rebajar en mayor proporción su tasa de paro juvenil han hecho que los Presupuestos regionales para 2017 sigan manteniendo en el empleo su principal foco. De hecho, dentro del Plan de Garantías Ciudadanas, los planes de empleo protegido son los que cuentan con mayor número de partidas presupuestarias con el objetivo, según ha apuntado en varias ocasiones el Ejecutivo autonómico, de que el paro juvenil no se convierta en un mal estructural de la comunidad autónoma.
