Cospedal amplía ahora ayudas sociales tras aumentar hasta el 37% la pobreza infantil
Tanto la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, como los miembros de su Gobierno, han defendido a capa y espada que los servicios sociales de la comunidad autónoma están garantizados, y que la supuesta herencia que dejaron los socialistas ha sido solventada con una mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. No parece tal cosa a la luz, no solo de los numerosos indicadores que sitúan a la región entre las autonomías con más pobreza y exclusión social de España, sino del hecho de que la Junta haya decidido ampliar con un millón de euros más el crédito para emergencia social aprobado en diciembre. En este caso, la partida va destinada a pobreza infantil, cuya tasa alcanza en Castilla-La Mancha un 37%.
A menos de un mes de las elecciones, el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) publica una resolución de la Dirección General de la Familia, Menores y Promoción Social por el que se amplía el crédito consignado para las ayudas de emergencia social de la región para el año 2015 en 1.163.000 euros. Esta partida, destinada a pobreza infantil, se suma a los cerca de 4 millones de euros que se aprobaron el pasado mes de diciembre. Es decir, más de cinco millones de euros en ayudas para una situación a la que María Dolores de Cospedal ni siquiera se refirió cuando realizó su balance de legislatura el pasado 30 de marzo.
Se trata de prestaciones de carácter económico, incluidas en el Plan Nacional para la Inclusión Social 2013-2016, para atender situaciones de urgente y grave necesidad, “excepcionales y previsiblemente repetibles”, que no pueden ser atendidas a través de ningún otro recurso para “prevenir, evitar o paliar situaciones de exclusión social”. Ayudas económicas que no cubren la situación denunciada por organizaciones no gubernamentales y entidades sociales. Por ejemplo, según el Colegio Oficial de Trabajadores Sociales, un millón de euros es la cifra que se ha recortado “cada día” en servicios sociales durante toda la legislatura.
Recientemente también se hizo público el Informe sobre Estado Social de la Nación, elaborado por gerentes de servicios sociales de toda España, que señala a Castilla-La Mancha como una de las comunidades con mayores tasas de pobreza, que además se sigue incrementando. El estudio también alerta sobre esa reducción del gasto en servicios sociales, siendo la comunidad autónoma también una de las que más recortó, concretamente 144 euros por habitante y año entre 2011 y 2013.
Pobreza infantil y exclusión social
Por su lado, en su reciente análisis sobre la situación de los servicios sociales en la región, los profesionales de este sector situaron en un 37% la tasa de pobreza infantil, un porcentaje similar al del total de personas que se encuentran actualmente en situación de riesgo de pobreza o exclusión social en Castilla-La Mancha. Son datos recogidos de los últimos informes elaborados por Save The Children, Unicef y la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN).
En su batería de propuestas para el ‘rescate social’, apuntan demás que la región lidera todos o casi todos los tipos de pobreza y que es “con mucha diferencia” la que menos ayuda a las personas y familias en situación de vulnerabilidad: diez veces menos en ayudas que la media nacional, “condenando a decenas de miles de hogares a ejercer la mendicidad, la caridad y la beneficiencia”.
Los trabajadores sociales de la comunidad autónoma han insistido en que son necesarias ayudas sociales públicas que combatan la pobreza económica y que atiendan las necesidades sociales de las familias de forma integral, “y no parcheando problemas que no resuelven casi nada”.
