La Generalitat recupera el transporte metropolitano que eliminó Barberá
Fin al conflicto entre los alcaldes socialistas del área metropolitana y el alcalde de Valencia, Joan Ribó (Compromís), por la recuperación prometida de las líneas de bus cerradas por la exalcaldesa Rita Barberá. Y eso gracias a la intervención de la Generalitat Valenciana y, en menor medida, de la Diputación de Valencia. El Consell cederá las competencias al Ayuntamiento de Valencia y le transferirá cerca de 400.000 euros para que la EMT llegue en cuestión de semanas o meses -no se ha fijado la fecha exacta- a Vinalesa, Moncada, Paterna, Burjassot, Mislata y Alboraia.
Con esta transferencia de dinero y competencias realizada por el Consell, se cumplen las dos premisas de los alcaldes socialistas y de Ribó: la recuperación de las líneas de autobús que pedían los municipios; y que no se hiciera con dinero del Ayuntamiento de la capital al no poder asumir el coste, según defendía el gobierno local. La Diputación de Valencia también aportará una cantidad de dinero -que no aún no han concretado- del convenio que ha firmado con la Generalitat de un millón de euros destinadas a cuestiones de movilidad.
“Esta medida trata de reparar el desaguisado que Camps y Barberá hicieron en 2012”, ha proclamado el presidente Ximo Puig. “Por fin después del recorte del PP, la EMT vuelve a nuestros pueblos”, ha asegurado el alcalde de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, en nombre de los alcaldes reunidos. En la reunión no ha estado presente el alcalde de Burjassot, Rafael García.
La medida aprobada por el departamento que dirige la consellera María José Salvador (PSPV-PSOE) es transitoria, ya que la Generalitat espera ingresar una cantidad procedente del contrato-programa al que renunció Camps que permita cubrir el coste de estas líneas. Para ello, se creó la Autoridad Metropolitana del Transporte, primera pieza de la Valencia metropolitana de un millón y medio de habitantes que promueve Ribó.