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El Banco Santander defiende que “ningún mercado ha funcionado en España tan bien como el hipotecario”

Fachada de la sede de Banco Santander en Madrid.

Diego Larrouy

El Banco Santander ha sido el último de los bancos en España en presentar sus resultados y, por tanto, en valorar la situación que se puede producir después de que el lunes el Tribunal Supremo dictamine quién debe pagar el impuesto hipotecario. En este sentido, José Antonio Álvarez, consejero delegado de la entidad, ha reclamado que, a partir de esta sentencia, “todos sepamos a qué atenernos”.

El directivo ha remarcado que “si un mercado ha funcionado bien en España ha sido el hipotecario” y ha señalado que “no había mucho que arreglar”. En este sentido, ha argumentado que “existe una competencia fuerte y sana” en cuanto al crédito hipotecario.

Álvarez, que ha comparecido por última vez en rueda de prensa como consejero delegado, ha subrayado que si la banca abona el impuesto “subirá los costes para nuestro negocio”. Ha abierto la puerta a repercutir parte de estos costes al cliente, aunque ha asegurado que dependerá “de las dinámicas competitivas en el sector”.

El directivo, en relación con las palabras de la consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, ha asegurado que “sí hay quien defiende a la banca”, remarcando que “hay muchos clientes satisfechos”. Sin embargo, ha matizado, que existe “una corriente de opinión que critica a la banca”. En este sentido, ha señalado a los medios, al argumentar que “saben que se lee más si se habla mal de los bancos”.

Álvarez ha lamentado que la reducción de las exenciones fiscales que afectan a la repatriación de beneficios de filiales en el exterior, incluido en los presupuestos, “va a tener un impacto sobre el resultado”. El ejecutivo ha argumentado, sin embargo, que el plan presentado ante Bruselas por parte del Gobierno “va en la buena senda” de reducción del déficit y el beneficio.

Álvarez ha destacado el crecimiento “sano y sólido” de la compañía. El grupo cerró los nueve primeros meses del año con un beneficio de 5.742 millones, lo que supone un incremento del 13%. Solo en el tercer trimestre, el incremento fue superior, del 36%. La compañía a achacado un impacto negativo por el efecto de las divisas en los mercados emergentes y de la hiperinflación en Argentina. El margen bruto (ingresos) se situó en 35.882, una caída del 1% respecto a un año antes. Sin el efecto divisa el incremento habría sido del 9%.

Brasil se ha cimentado como el primer mercado del grupo y Álvarez ha defendido que “si todo va según lo previsto” seguirá siendo así en los próximos años. Sobre la victoria del ultraderechista Jair Bolsonaro en las elecciones del domingo, el directivo ha destacado que “el mercado lo ha recibido positivamente” por sus propuestas económicas “para recuperar la senda del crecimiento”.

En lo que se refiere a España, ha remarcado que una vez suban los tipos de interés mejorará el negocio de de la filial, hoy ya el segundo mercado por volumen de beneficio. El resultado de la compañía en España ha crecido un 18%. Además, ha avanzado que en el mes de noviembre arranca la integración con Popular, aunque no ha avanzado los cierres de oficinas.

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