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El Gobierno prepara más incentivos para retrasar voluntariamente la jubilación

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, en su comparecencia en el Congreso

Laura Olías

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El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha avanzado este miércoles en la comisión del Pacto de Toledo varias medidas en las que está trabajando su equipo para la próxima reforma de la Seguridad Social que pretende equilibrar sus cuentas dentro de esta legislatura y dar “certidumbre” a la población sobre el sistema de pensiones. Entre ellas, Escrivá ha avanzado que el Gobierno está estudiando mejorar y ampliar los incentivos al retraso voluntario de la jubilación, que en España son inferiores respecto a otros países, así como la modificación para que los autónomos coticen según sus ingresos reales y el traspaso de los llamados “gastos impropios” de la Seguridad Social a otras partidas de los Presupuestos Generales del Estado.

La de este miércoles ha sido la segunda comparecencia del ministro Escrivá en la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo, que está ultimando sus trabajos para emitir las recomendaciones sobre el futuro del sistema público de pensiones. En julio y, especialmente en septiembre, la comisión ha acelerado sus trabajos para intentar llegar a un acuerdo en breve, una posibilidad que han rebajado un poco esta tarde en el PP, cuyo portavoz Tomás Cabezón ha llamado a no correr para “no tropezar”.

José Luis Escrivá sí ha urgido a los partidos políticos a que alcancen ya un acuerdo para que el Gobierno comience a reformar el sistema cuanto antes, por ejemplo para la revalorización de las pensiones según los precios el año que viene y para dar “certidumbres” a los pensionistas, ya que el Ejecutivo se ha comprometido a trabajar sobre el concenso político que salga del Pacto de Toledo.

A partir de este acuerdo, el ministro ha recordado que el Gobierno pretende alcanzar también un consenso social con los sindicatos y la patronal, con los que pretende iniciar en breve la mesa de negociación al respecto.

Fomentar que la gente siga trabajando

Con la base del borrador de recomendaciones en las que trabaja el Pacto de Toledo, José Luis Escrivá ha desgranado algunas de las líneas de actuación que ya está preparando su equipo para adelantar en los trabajos de la reforma legislativa. “Estamos trabajando para estar preparados, para poder llevar lo antes psoible a la Cámara estos cambios”, ha afirmado.

El ministro ha adelantado que el Gobierno querría empezar a sacar algunos de los llamados “gastos impropios” de las cuentas de la Seguridad Social ya en los Presupuestos Generales del Estado del próximo año, para avanzar hacia el equilibrio de las cuentas del organismo. Según la previsión del Ejecutivo, el déficit de la Seguridad Social escalará hasta el 2% este 2020, desde el 1,3% de 2019, de forma “transitoria” por el efecto de la pandemia, pero la estimación del Gobierno es que conforme se vaya “normalizando” la situación el déficit volverá a bajar. Sin implementar ninguna reforma, Escrivá ha afirmado que prevé que el déficit volvería en 2023 a niveles similares a los actuales, algo superiores al 1,3%.

La Seguridad Social calcula que sacar el total de “gastos impropios” de las cuentas de la Seguridad Social –como las ayudas a la contratación de las empresas, los complementos de maternidad y los gastos administrativos del organismo– restaría unos 23.000 millones en 2023, algo más del déficit que se prevé en el organismo para esa fecha, unos 20.000 millones de euros. Por ello, la conocida como “separación de fuentes” podría acabar con el agujero presupuestario de la Seguridad Social en ese año, ha destacado el ministro.

Escrivá ha apostado por otras medidas directas sobre el sistema de pensiones para garantizar la sostenibilidad presupuestaria en el medio plazo y de cara a la jubilación de la numerosa generación del “baby boom”. Como ya avanzó en junio, el ministro apuesta por penalizar más las jubilaciones anticipadas, cuyo modelo ha criticado por su carácter regresivo. Por ejemplo, la penalización anual de las personas que cotizan por la base máxima, con mayores sueldos, es del 2% de su pensión, mientras que los trabajadores que cotizaron por la base media asciende al 8%. El ministro ha llamado a acabar con el aumento de las jubilaciones anticipadas, que crece con fuerza desde 2014.

En esta ocasión, el ministro se ha centrado además en los planes de su equipo para bonificar e incentivar más los retrasos voluntarios en la jubilación. “Nos equilibra mucho el sistema”, ha defendido Escrivá, que ha subrayado el gran efecto en las cuentas públicas. El ministro ha destacado que es una opción muy poco explotada y muy desconocida por la población, que su Mininisterio pretende mejorar y difundir. El responsable de la Seguridad Social ha destacado que, en España, las bonificaciones anuales medias por retrasar la jubilación es del 3,2%, inferiores a muchos de nuestros vecinos europeos, como Francia (5%), Alemania (6%) y Reino Unido (10,4%), entre otros países.

Cotización de autónomos según sus ingresos

La cotización de los autónomos, para que pasen a hacerlo por sus ingresos reales y abandonen el sistema voluntario, es otro de los frentes en los que ya trabaja la Seguridad Social, en colaboración con el ministerio de Hacienda. José Luis Escrivá ha adelantado que ambos llevan meses trabajando para dar una respuesta “relativamente inmediata” al desarrollo de un plan por tramos que logre de manera “gradual” la cotización por ingresos reales de los autónomos, con un modelo “sostenible” en el tiempo.

El ministro no ha querido ahondar en esta nueva fórmula de cotización, dado que aún no se la ha planteado a los colectivos de autónomos, pero ha explicado que se implementaría de forma gradual y que “conllevaraá que un porcentaje elevado de autónomos vea reducidas sus cotizaciones”. Para otros, supondrá un aumento, ya que la inmensa mayoría de los autónomos (87%) cotiza por la base mínina, independientemente de sus ingresos.

Por último, el ministro ha vuelto a insistir en sus planes para fomentar más los planes de pensiones complementarios de trabajo en detrimento de los planes de pensiones individuales, a los que pretende reducir las desgravaciones fiscales por su carácter regresivo, por el que benefician más a las personas con mayor renta.

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