El PP alavés se moviliza para llevar el máximo de compromisarios al congreso
Esta semana será clave para la designación del núcleo duro del futuro PP vasco que presidirá Arantza Quiroga tras el congreso extraordinario del próximo 8 de marzo, el primer cónclave asambleario de la historia de esta formación de centro derecha. Entre los dirigentes de los populares vascos se ha instalado la necesidad de cerrar definitivamente el capítulo de crisis abierto por la propia Quiroga tras su decisión de prescindir de su actual 'número dos', el alavés Iñaki Oyarzabal. Su voluntad es convocar al final de esta misma semana una reunión definitiva con los presidentes provinciales para atar el equipo que pretende para la nueva etapa.
Un congreso que al ser asambleario -se podía apuntar cualquier militante del partido- lo deja abierto todo, incluso el peso de cada territorio: Álava se ha movilizado y cualitativamente ya es la provincia que más compromisarios va a aportar al cónclave con algo más de 400 militantes apuntados. Bizkaia, a falta del recuento final de algunas sedes, estaba en unos 380, pese a que el grueso de la militancia total del partido (unos 5.000 en total, aunque movilizados realmente son menos de 2.000) procede del territorio cuya presidencia ostenta Antón Damborenea, según fuentes del partido. En Gipuzkoa, los compromisaríos serán alrededor de 140. El Comité de dirección del congreso, que encabeza la dirigente vizcaína Nerea Llanos, tiene previsto hacer el recuento definitivo hoy y aunque Bizkaia pueda finalmente superar a Álava cuantitativamente, los alaveses han demostrado un músculo previo al congreso importante. Lo que también les hace más fuertes en la negociación.
“Estamos abiertos en canal y lo peor es que no se entiende cómo es posible que Quiroga haya realizado este movimiento”, señala a eldiarionorte.es un hombre que ha dirigido el PP vasco en épocas pasadas. “Esto no se puede demorar más”, apuntaba la misma fuente.
El ánimo de Arantza Quiroga es no prolongar más esta “agonía”, en palabras de otro dirigente. Nada está cerrado y, algunas fuentes del PP alavés, precisan que aun se debería producir un encuentro entre la presidenta y los responsables del PP en Álava para definir el equipo que va a pilotar la presidenta en el “nuevo tiempo” abierto en Euskadi. La presidenta del PP vasco puede apostar finalmente por un secretario general alavés en sustitución de Oyarzabal para cerrar la crisis y llegar al congreso en paz, recuperando así la tranquilidad interna. Pero no está cerrado.
Oyarzabal, que se ve fuera de su puesto actual, está dispuesto a desempeñar el papel que se le otorgue en esta nueva etapa del partido. Además, tras hablar con los dirigentes en Génova -sede nacional del PP- sabe que su continuidad en el cargo que ocupa ahora en la Ejecutiva nacional -secretario de Justicia, Derechos y Libertades no está en cuestión.
Quiroga “no puede renunciar” al peso de Álava
El diputado general de Álava, Javier de Andrés, afirmó ayer que no ve “discrepancias insalvables” en el PP vasco, sino “diferentes formas” de expresar los “mismos proyectos”. Asimismo, dijo que los miembros del PP alavés deben tener “un peso e influencia importante” en la nueva Ejecutiva y abogó por no plantear la cuestión “como una pelea o disputa territorial”.
De Andrés, que participó ayer en el Fórum Europa en Bilbao, cree “natural” que se tenga “muy en consideración” la experiencia de gobierno del PP en Álava, cuyas dos principales instituciones -Diputación y Ayuntamiento de Vitoria- están pilotadas por los populares, experiencia que, “por desgracia”, el partido no tiene en ninguno de los otros dos territorios, además de los “resultados electorales favorables” en ese territorio. “No se puede renunciar a ello y estoy convencido de que Arantza Quiroga no va a renunciar a eso”, sostuvo.
Preguntado por próximo congreso, De Andrés defendió que lo que hay que hacer es “no hablar tanto de personas y más de proyecto”, y apuntó que en el PP vasco “no hay discrepancias insalvables, sino que existe una coherencia en el discurso”. “No hay unanimidad, sino distintas formas de expresar los mismos proyectos. Esa forma de expresar sí puede dar lugar a diferencias que hay que tener en consideración a la hora de formar los equipos”, ha indicado.
Asimismo, pidió no plantear el próximo Congreso como una “pelea o disputa territorial”, lo que, a su juicio, sería “un error”. “Todos tenemos que sumar y Álava puede aplicar cosas distintas al resto y eso es un valor que tiene el PP vasco”, ha añadido.
Respecto a la posibilidad de que sea designado nuevo secretario general de la formación ha defendido que “lo que hay que hacer es no hablar tanto de personas y más de proyecto”, ya que “no es una cuestión de resolver el Congreso del día 8, sino que hay que pensar en el futuro”.