Cierra sus puertas la exposición del preso de ETA Jon Bienzobas sin visitas en su última tarde

La de la Kultur Etxea (Casa de la cultura) de Galdakao, una localidad a pocos minutos en coche de Bilbao pero a la que no llega el metro, es una exposición de cuadros y esculturas realizados por un preso de ETA que, fundamentalmente, ha sido visitada por familiares de presos de ETA. Tras dos semanas abierta al público, este viernes ha cerrado sus puertas y el recuento oficial hasta la tarde marcaba 760 visitas. En una hora en la sala, a pocas horas de que baje definitivamente la persiana, ningún vecino o visitante se ha decidido a conocer los cuadros y esculturas ahí expuestos.

La muestra se encuentra en el segundo piso de la Kultur Etxea, un edificio construido frente a un parque que este viernes se encontraba repleto de niños. Padres e hijos han hecho cola para ver la película Joker en los cines que comparten escalera con la exposición, pero ninguno se ha acercado a ver qué se escondía tras la puerta de la sala principal, donde albergaban las obras de Jon Bienzobas, condenado a 266 años de prisión por asesinar al expresidente del Tribunal Constitucional Francisco Tomás y Valiente en febrero de 1996, y a un hombre en Getxo en 1999.

Durante una hora tan solo han permanecido en la sala dos hombres. Al preguntarles si podíamos realizar fotografías y quedarnos un rato han respondido “sí, claro, la sala es suya, no creemos que llegue nadie”. El primero, un joven que trabaja en diferentes actividades dentro de la Kultur Etxea, como en las exposiciones y en el cine y otro, mayor, que ha vigilado, algo desconfiado, la exposición “ha llegado gente, que se le veía con malas intenciones, como queriendo boicotear”, ha asegurado. El más joven de ellos, que lleva el recuento en una hoja de todas las personas que entran, ha añadido que si ha acudido tanta gente a ver las obras es por el carácter político de las mismas.

“Mucho de los que se han acercado eran familiares de presos que han querido dar apoyo al acontecimiento. Un abogado incluso dio una charla la semana pasada para mostrar las condiciones en las que se encuentran los presos de ETA en las cárceles, aislados y con muy malas condiciones, para explicar que lo que se busca es que sean tratados como el resto de los presos”, ha explicado.

Al entrar a la sala, hay una descripción sobre la vida de Bienzobas en la que en ningún momento se indica que los actos que le llevaron a prisión fueron los asesinatos que cometió. En el texto se indica que “su compromiso político” lo llevó desde muy joven fuera de su pueblo, Galdakao y que esta exposición, que lleva el nombre de Desde la ventana de la celda, es el resultado de “la creatividad que se impone hasta en los peores escenarios”. Cada una de las obras tiene una pequeña descripción en la que se indica en qué celda se encontraba su autor en el momento en el que la creó y detalles personales, como que en el año 1997, cuando comenzó a dibujar, “tan solo disponía de papel y lápiz” o el ejemplo de una obra en la que dibuja a un indio y la descripción detalla que en realidad se parece al padre del etarra. Pequeños gestos, que según el periodista Gorka Angulo, uno de los visitantes de la muestra, humanizan al autor.

Exposición “humanizando a un asesino”

“La exposición no tiene ningún valor artístico. Cualquier exposición de gente que se apunte a un taller de artes manuales puede tener el mismo nivel o más. Hay que recordar que en Galdakao ETA ha asesinado a 11 personas. Este tío está en la cárcel porque es un asesino. No es un preso político. Se hace una exposición porque lleva 20 años en la cárcel, pero no nos cuenta por qué está en la cárcel. Está por asesinar y si a un tío por asesinar con una justificación política se le monta una exposición, también le deberían montar una exposición a otro tipo de presos. Me parece una vergüenza que un asesino que está orgulloso de serlo porque no está arrepentido de sus crímenes, se le haga una exposición exaltándole y humanizándole. ¿Dónde están sus víctimas?”, ha denunciado el periodista en una entrevista con eldiarionorte.es.

Tanto el Gobierno de España como el Gobierno vasco pidieron tras la inauguración de la muestra al Ayuntamiento de Galdakao, gobernado por EH Bildu, la retirada de la exposición. Por su parte, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) realizo una petición a la Audiencia Nacional para que se cancelase. Sin embargo, esta fue desestimada, ya que el juez consideró que ni de la información aportada por el colectivo de víctimas ni del informe encargado a la Ertzaintza se desprende que el acto haya sido promovido por una organización ilegal ni que la misma exposición “vaya a constituir un acto de humillación y desprecio a las víctimas”.

“Exclusivamente se trata de una exposición de cuadros y esculturas realizado por una persona condenada a prisión, integrante de la organización terrorista ETA”, añade en su resolución el juez, que consideró que “no procede por el momento la adopción de ninguna medida cautelar”. No obstante, ordenó a las fuerzas y cuerpos de seguridad que elaboren “reportaje fotográfico o videográfico sobre las obras expuestas en la sala de exposiciones”.