Plan de contingencia contra la gripe en Osakidetza: hasta 540 nuevas camas pero recorte horario en el 27% de ambulatorios
El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha elaborado un plan de contingencia para la Navidad dada la “circulación adelantada” de la gripe estacional y la previsión del “habitual incremento” de demanda asistencial en esta época del año. Sin embargo, la moneda tiene dos caras. Por un lado, se prevé la posibilidad de disponer hasta de 540 camas hospitalarias más. Pero, por otro lado, se admite que el 27% de los centros de salud de la red de atención primaria verá reducido su horario por escasez de personal en esta época del año.
El documento, fechado a 22 de diciembre y al que ha tenido acceso este periódico, arranca con una mención a la oleada de gripe. Se ha “intensificado” la “presión” sobre el sistema sanitario y, aunque se ha dado ya por superado el pico de una campaña estacional especialmente activa en 2025 pese a que la incidencia supera los 600 casos por cada 100.000 habitantes -un indicador que con la COVID-19 en la pandemia era “alerta roja”-, se asume como “habitual” que las vacaciones navideñas comportan un pico de “demanda asistencial”. Por ello, son precisas medidas “excepcionales”.
El plan parte de la base de que “el índice de ocupación global de los hospitales de la red es del 82%” en el momento de elaboración del diagnóstico, es decir, este lunes. Sin embargo, se apunta a que “Osakidetza está preparada para un incremento de camas en caso de que fuera necesario”. “En concreto, la ampliación puede llegar hasta 540 camas más, 59 en Araba, 287 en Bizkaia y 194 en Gipuzkoa”, indica el Servicio Vasco de Salud.
En el ámbito hospitalario se anuncia un “análisis diario” de la disponibilidad de plazas para ingresos, tanto en planta como en UCI, así como una “optimización” de las medidas de “aislamiento”. Otras medidas son la habilitación de “consultas de alta resolución” en medicina interna, neumología y cardiología, una “gestión ágil” de las altas para ir liberando espacios y el “refuerzo del personal médico y de enfermería en los servicios con mayor demanda”. Se plantea también incrementar la derivación de pacientes a hospitalización domiciliaria o a centros de media y larga estancia o a residencias, en su caso. Se quiere, igualmente, “potenciar” la “implicación” de laboratorios, radiodiagnósticos y equipos de medicina preventiva.
La actividad quirúrgica también se ve limitada “en aras a disponer del mayor número de camas posible”. Así, se acotarán los ingresos previos al mismo día de la operación o incluso se irá a cirugías sin hospitalización. Se priorizarán las operaciones de oncología y de pacientes ingresados frente a otras actividades, asimismo.
Sin embargo, es ya habitual en Navidad que el incremento de la demanda se vea acompañado de una reducción horaria en atención primaria por la acumulación de vacaciones del personal. Se explica que la idea es “poder contar en enero con todos los recursos disponibles para hacer frente al posible incremento de circulación de virus respiratorios, que suele tener sus picos más altos tras la festividad de Reyes y con la vuelta a la normalidad”. Expone Osakidetza que el 73% de los ambulatorios “mantendrá el horario habitual”, lo que comporta 'de facto' una reducción en el otro 27%. Se rebaja al 10% la afección en consultorios que únicamente tienen servicio durante uno o dos días semanales, los de pueblos más pequeño. En 2024 llegaron a ser un 38% los centros afectados, según datos oficiales facilitados hace doce meses.
La norma general es que el horario pase a ser de 8.00 horas a 17.00 horas. Los ajustes, que son variables en cada demarcación y obligan a consultar la web oficial, han arrancado ya esta semana y podrían estirarse en algunos supuestos hasta el 10 de enero, según el plan de contingencia. Los PAC (puntos de atención continuada que atienden casos no urgentes cuando los ambulatorios no están disponibles) mantendrán “su horario habitual”, aunque en otros años se han registrado turnos sin personal médico.
El documento prevé una “monitorización” de la “demora asistencial” en atención primaria con el ánimo de “priorizar” citas “espontáneas y en el día”. Eso implica, igualmente, una prometida mejora de la “accesibilidad” telefónica. Significativamente, Osakidetza insiste en llamar a estos servicios como “atención al cliente” y no “atención al paciente”. Su busca también liberar cupos médicos con consultas únicamente de enfermería en “procesos leves autolimitados”.
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