El antídoto contra el camalote está listo desde 2011, pero nadie sabe por qué no se aplica
Ha superado varias fases de prueba, con diferentes temperaturas y climas. Los experimentos reales en el propio río pudieron determinar que el herbicida natural era efectivo. Lo lograron crear años atrás investigadores de la Universidad de Extremadura y el Instituto de Investigaciones Agrarias Finca La Orden, perteneciente a la Junta. Y funciona, este compuesto seca el camalote, la planta invasora que crea estas semanas estragos en el Guadiana.
Fuentes de la Finca La Orden han confirmado a este diario que en el año 2010 se proyectó la patente del herbicida, y un año más tarde se presentó oficialmente en el registro de la patente internacional (que puede dilatarse en el tiempo). El objetivo, proteger un producto que ha sido creado con fondos públicos ante posibles multinacionales .
Es precisamente en el mes de agosto, con las altas temperaturas, cuando el camalote eclosiona con fuerza e invade todos el cauce del Guadiana, hasta Portugal. Mientras eso ocurre el bio-herbicida creado como antídoto en Extremadura no se usa.
La pregunta evidente que surge (¿por qué no?), se la ha trasladado este diario tanto a los investigadores de la Finca La Orden como a la Junta y Confederación, que es la competente. Hasta el momento no hay respuesta de por qué no se aplica el antídoto contra el camalote en el Guadiana.
Los científicos confirman es que el producto podría aplicarse independientemente del proceso de la patente. Por su parte la el nuevo Gobierno de la Junta confirma que el responsable de la gestión de estas aguas es la Confederación Hidrográfica del Guadiana, y por los tanto el Estado.
“Parece ser un problema de investigación”
Las fuentes consultadas por eldiarioex transmiten que todo apunta a que se trata de un problema de descoordinación. Sin más.
“No se ponen de acuerdo, a pesar de lo sencillo que parece consultar a una asociación de pescadores, por ejemplo, si quieren aplicar el producto en la zona del Guadiana en la que pescan”, explican.
Por parte de la confederación, las labores se centran en controlar las poblaciones de la mano de cuadrillas que recogen a diario decenas de toneladas del cauce a mano y con maquinaria.
En los últimos 10 años se ha destinado para la eliminación de camalote una inversión de 24 millones de euros, y aproximadamente 500.000 euros para los años 2014-2016 en proyectos INVASEP (otras especies invasoras vegetales y animales). Teniendo en cuenta los elevados costes de la lucha contra la planta amazónica del camalote, la pregunta sigue siendo por qué no se utiliza el herbicida.