El Gobierno del PP no quiere a Extremadura
Extremadura, el paraíso, para un puñado de personas. Tanto la biodiversidad como el entorno rural que tenemos en nuestra Comunidad Autónoma son dos de las muchas virtudes de esta maravillosa tierra. Pero, ¿qué ocurre cuando gobierna un partido conservador?. Pues que le interesan más estas dos facetas para explotarlas como “cortijo de ocio” que como una oportunidad para combinar desarrollo, innovación y sostenibilidad.
Una vez más, el Gobierno central, que lleva adelante las políticas del supuesto programa del PP, nos da la espalda. El Real Decreto 900/2015, de 9 de octubre, por el que se regulan las condiciones administrativas, técnicas y económicas de las modalidades de suministro de energía eléctrica con autoconsumo y de producción con autoconsumo, o también llamado decreto de autoconsumo en el que integra el “Impuesto al sol”, nos pone otro palo en la carreta en el enésimo intento por parte de la región de salir adelante.
Extremadura es una tierra privilegiada, muchísimas horas de sol con cielos limpios y extensiones de tierra, en muchas ocasiones no cultivadas por no ser rentables, sin embargo, no nos dejan prosperar, nos vuelven a vender a las multinacionales, a las empresas que explotan las energías, que las controlan y las regulan en función de su conveniencia y no las de la ciudadanía.
Nos deniegan medios de transporte eficaces, no hablo ya del AVE, sino por ejemplo el Alvia, en una zona transfronteriza y al que Portugal sí que hubiera podido apostar e invertir en este tipo de tren.
Carecemos de vuelos regulares a las principales ciudades del Estado. Cualquier persona de negocios tiene que recorrer una larguísima distancia en automóvil, en autobús o en tren. Lo que supone una inversión en tiempo y esfuerzo que mucho deberían merecer la pena las inversiones en nuestra región para realizar el trayecto. Por no hablar de las personas que en muchas ocasiones se desplazan para cualquier conferencia o acto cultural, son viajes de verdadero calvario en pleno siglo XXI, como comentan en infinidad de ocasiones.
¿Quien va a querer invertir o venir a Extremadura con las comunicaciones que tiene?.
Tenemos un potencial enorme para explotar las energías renovables. Pequeñas y medianas empresas de nuestra región podrían ser punteras a nivel europeo en estas modernas y amables nuevas tecnologías que son, a día de hoy, hasta un 80% más económicas que en el pasado, en sus orígenes comerciales.
Ni este Gobierno, ni el Partido Popular, quieren que Extremadura se desarrolle, queda patente.
¿Quién querría que su coto de caza dejara de serlo?