El Parlamento de Navarra solicita por unanimidad medios para esclarecer los casos de abusos en la Iglesia

Nuevo hito el que han logrado las víctimas de abusos sexuales en centros religiosos de Navarra que hace unas semanas celebraban el primer congreso sobre pederastia en España, al que no quiso acudir el arzobispo de Pamplona pese a la invitación. Un año después de la primera denuncia interpuesta por José Luis que dio paso a más de una treintena de demandas por abusos en Navarra y a la creación de la Asociación de Víctimas de Abusos Sexuales en Navarra, el Parlamento de la Comunidad Foral ha aprobado por unanimidad una resolución por la que se insta al Gobierno de Navarra a articular los “medios y cauces necesarios” para conocer y esclarecer los casos de abusos sexuales en los centros religiosos navarros.

Además, la moción, que fue presentada por Izquierda-Ezkerra, también recoge otro punto en el que se le solicita al Ejecutivo de María Chivite a “arbitrar el procedimiento que estime oportuno para que las personas afectadas puedan exponer y denunciar hechos de estas características”.

Este segundo punto ha sido mu celebrado por la asociación de víctimas ya que se trata de una petición que llevan reclamando desde su creación, ya que hasta le fecha tan solo se ha logrado que treinta haya presentado denuncia a pesar “de que hay muchos más”, cuenta Marcos Leyún denunciante de abusos en el colegio Maristas de Pamplona y miembro de la asociación. Leyún añade que varios compañeros suyos de clase le han escrito o llamado para contarle que ellos sufrieron los mismos abusos que él ha contado en la prensa, pero que no se atreven a denunciar y conceder entrevistas “porque no quieren ser reconocidos”. “El que pudiera existir una oficina en la que se pudiera denunciar de forma anónima ayudaría a que muchos se atrevieran a dar el paso”, explica.

Desde la asociación consideran éste un paso importante para la creación de una comisión que se encargue de investigar los abusos sexuales cometidos por sacerdotes en los colegios de Navarra, ya que, pese a la orden de Papa Francisco del levantamiento de los archivos parroquiales, denuncian que el arzobispo de Pamplona, Francisco Pérez se sigue negando a sacar a la luz más casos de abusos, y lo que es más grave, pedirles perdón por el daño recibido por la Iglesia. Algo que ellos consideran fundamental para “reparar el dolor causado”.

También confían en que esta sea una forma de seguir dando pasos para que sus casos y el de otros muchos en España lleguen al Congreso para conseguir una modificación en la Ley para que este tipo de delitos no prescriban. Es la gran traba con la que se encuentra cualquier denunciante de abusos sexuales cuando era niño. La denuncia interpuesta de adulto no tiene recorrido por la vía penal al tratarse de delitos sucedidos muchas ves hace más de 50 años, como es el caso de Marcos Leyún e incluso con el sacerdote que cometió los abusos ya fallecido.