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Un bulo sobre “mercenarios” españoles y un túnel para sacar a Leopoldo López de la Embajada tensa la relación con Caracas

Captura del perfil de Instagram del ministro venezolano de Cultura, Ernesto Villegas

Pedro Águeda

La reforma de la residencia del embajador español en Caracas quedó paralizada varios días el pasado mes de agosto a raíz de que miembros del Gobierno de Nicolás Maduro y medios afines difundieran que las obras escondían un supuesto plan de fuga del opositor Leopoldo López a través de un túnel secreto. El ministro de Cultura venezolano, Ernesto Villegas, lanzó el 4 de agosto la alerta en Instagram, donde publicó fotografías de los pasaportes de cuatro supuestos “mercenarios” llegados desde España para la excavación. Según ha podido constatar eldiario.es, se trata de miembros del GEO de la Policía española, el grupo de élite que tiene entre sus misiones garantizar la seguridad de las delegaciones diplomática españolas.

La campaña mediática encendió la alarma en la delegación diplomática española porque se sumaba a otros hechos que no habían trascendido hasta ahora. El 7 de agosto, tres días después de que comenzaran los bulos, dos trabajadores venezolanos que pretendían acceder con un camión hormigonera a la residencia del embajador fueron detenidos y conducidos a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) para ser interrogados por la obra, según consta en un informe remitido a Madrid desde la embajada. También fue requerido por el servicio secreto el arquitecto responsable.

La obra en la residencia del embajador consiste en acondicionar un espacio de seguridad previo a la tapia para dificultar el acceso a la residencia de quien quiera, por ejemplo, utilizar esa vía para solicitar asilo. En aquellos días, todo el que pretendía entrar o salir de la residencia era detenido por el Sebin por un tiempo de hasta media hora. 

Días antes de que comenzara a difundirse el bulo, el embajador español, Jesús Silva, había sido informado de una supuesta reunión mantenida un mes antes por Diosdado Cabello, vicepresidente primero del PSUV y hombre fuerte del régimen bolivariano, con personas de su entorno en la que el jerarca habría comentado la necesidad de “capturar” a Leopoldo López. Para ello, según la información que llegó a la Embajada, Cabello apostaba por recurrir a los “colectivos” ciudadanos para evitar así que se pudiera responsabilizar públicamente al Gobierno de allanar suelo español. La delegación española tomó esa información con prudencia, añaden las fuentes consultadas.

Consultado por eldiario.es, el Ministerio de Asuntos Exteriores español ha calificado de “informaciones falsas” las publicaciones acerca del plan de fuga. Respecto a los hechos ocurridos a las puertas de la residencia del embajador, una fuente autorizada del Ministerio ha confirmado que en los días posteriores a esas publicaciones se produjo “una vigilancia reforzada” por parte del Sebin alrededor de la delegación y también que “unos trabajadores” fueron trasladados al Helicoide, la sede del servicio secreto. Exteriores ha declinado comentar si contaba con informaciones que apuntaban a un posible asalto a la delegación diplomática.

Todas las pruebas que había aportado el ministro de Cultura venezolano en Instagram eran fotografías de dos camiones a las puertas de la residencia del embajador y otras instantáneas del diplomático ante su casa rodeado de cuatro hombres vestidos de paisano, en posición de vigilancia y portando armas largas. Villegas también destacaba que el perro que aparece en la fotografía es el del embajador español, según apuntalaba con una segunda foto de otro momento en el que aparecen el diplomático y su mascota.

A partir de ahí, las informaciones se multiplicaron. Las cadenas de televisión replicaron el contenido de la publicación en Instagram del ministro, pero otros medios iban más allá sumando información propia. Según Villegas, los “mercenarios” habían llegado a Caracas en mayo mientras que un digital progubernamental aseguraba que habían aterrizado “varios días” antes de la publicación procedentes de una escala en París. En uno y otro caso, han confirmado fuentes diplomáticas, se trataba de funcionarios policiales españoles del GEO dándose el relevo en la misión.

El Ministerio español de Exteriores ha explicado a esta redacción que el embajador Silva ha mantenido diversos contactos con autoridades del país, incluido el canciller, Jorge Arreaza, para “desmentir rotundamente” el supuesto plan de fuga de López y manifestar su “malestar” porque dirigentes políticos del país, entre ellos Diosdado Cabello, hubieran propagado el bulo. “Fueron declaraciones poco constructivas”, ha añadido un portavoz de Exteriores.

El ministro de Cultura venezolano arrancaba su publicación en Instagram de la siguiente forma: “Alertamos al mundo que el terrorista Leopoldo López, en complicidad con miembros de la Embajada de España en Venezuela, está planeando su fuga del territorio venezolano, a través de un túnel que está siendo construido desde el Interior de la embajada de España en Venezuela”. También aseguraba que “en las últimas semanas se obtuvo gran cantidad de información y material audiovisual” que lo confirmaba, sin adjuntar más que las fotografías citadas.

En el comentario de la publicación de Instagram, el ministro venezolano escribió: “El 19 de mayo de 2019, aproximadamente a las 3:00 horas arribaron a territorio nacional cuatro ingenieros militares españoles especialistas en construcción de obras soterradas bajo la fachada de persona administrativo para comenzar con el asesoramento y construcción del túnel por el cual tiene previsto escapar el terrorista Leopoldo López. Los escombros y desechos una vez apilados en el interior son evacuados de la embajada de España en no menos de seis camiones”. A continuación, Villegas asegura que “esta información fue dada a conocer por un periodista español desde Madrid, quien alertó a las autoridades venezolanas”.

Cabello se refirió al supuesto plan de fuga en una rueda de prensa del PSUV al día siguiente, el 5 de agosto. “Que la embajada de España haga esas cosas, de demostrarse que sea cierto, que no nos extraña, es más, lo creemos, pero que se demuestre... es nuestra opinión... no nos extraña. Es la España que trajo para acá unos vigilantes: mentira, son policías, y nosotros no los dejamos entrar, para la seguridad de la Embajada. Cada vez se aíslan más ellos en su odio. Cuánto odio contra Venezuela y todavía no han podido formar Gobierno”, afirmó el expresidente de la Asamblea Nacional. 

Leopoldo López se encuentra en la residencia del embajador Silva desde el pasado 1 de mayo, horas después de que fracasara su llamamiento a un levantamiento militar junto a Juan Guaidó, finalmente fracasado. Había logrado escapar del confinamiento en su domicilio, que se había iniciado en 2017, tras pasar tres años en prisión. López, su esposa, Lillian Tintori, y su hija de 15 meses, se refugiaron primero en la Embajada de Chile, pero horas después decidieron trasladarse a la delegación española. Tintori, sobre la que no pesa reclamación judicial en Venezuela, reapareció junto al bebé en España un mes después. El partido opositor en el que milita el matrimonio aseguró que pudo dejar la embajada y salir del país con ayuda de colaboradores en las Fuerzas de Seguridad venezolanas.

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