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El exalcalde de Majadahonda dice que Álvaro Lapuerta le llamó para que ayudase a empresas que “colaboraban” con el PP

El exalcalde de Majadahonda Guillermo Ortga

EUROPA PRESS

El exalcalde de Majadahonda (Madrid) Guillermo Ortega ha declarado este martes que el extesorero del PP Álvaro Lapuerta le llamó en una ocasión para que adjudicase contratos públicos municipales a dos empresas porque era “gente que colaboraba con la casa”. Así lo ha declarado ante el tribunal que le juzga por su implicación en la primera época de actividades de la trama Gürtel (1999-2005).

Ortega ha negado haber recibido un fax procedente de la sede nacional del PP en el que se instaba a ayudar a empresas que supuestamente habían financiado la campaña electoral de las elecciones municipales y autonómicas de 2003. El exconcejal de Majadahonda y denunciante de la trama, José Luis Peñas, aseguró en su declaración que el exalcalde le informó de esa misiva que llevaba desde “tesorería o gerencia” para que se “recompensase” a una “serie de empresas” por haber entregado “un donativo” a la formación política para dicha campaña.

“Yo ese fax no lo he recibido nunca y no he podido enseñarle un fax porque me parece de una torpeza absoluta”, ha añadido. No obstante, el exalcalde -cuya declaración comenzó en la sesión de este lunes y que se negó a contestar a las preguntas de la Fiscalía y de algunas defensas- ha señalado que “al principio” de estar en la alcaldía recibió una llamada de Lapuerta -cuya causa está archivada por demencia sobrevenida- para que “echase una mano” a las empresas Licuas y Coarsa, ya que “era gente que colaboraba con la casa”.

Estas empresas, propiedad de de Joaquín Molpeceres -que aparece en la pieza denominada 'Papeles de Bárcenas'-, resultaron beneficiarias de adjudicaciones por más de 7 millones de euros. En concreto, Coarsa percibió entre 2001 y 2002 un total de 2.800.765,85 euros por la construcción de un centro de Educación Secundaria, mientras que Licuas se benefició de numerosos contratos entre los años 2002 y 2004 que ascendieron a más de 5 millones de euros, según indica el escrito de acusación de la Fiscalía.

“Me presentó una oferta que no podía rechazar”

Ortega, que se ha definido como un hombre de partido, ha dicho que las dos veces que ha dejado un cargo ha sido porque se lo ha pedido tanto la expresidenta del PP madrileño Esperanza Aguirre como el exsecretario general de la misma formación política a nivel regional, Francisco Granados. “Acato órdenes de partido en todo momento”, ha dicho.

El exalcalde ha afirmado que tiene “verdaderas lagunas” de cuando conoció a Francisco Correa, presunto 'cabecilla' de la trama. Aún así, dice que coincidió con él la primera vez entre 1994 y 1996, un domingo que se acercó a la sede regional del PP de Madrid en la calle Génova, donde se encontró al empresario “vestido de 'sport'”. Según ha asegurado, sabía quién era porque organizó la campaña del expresidente del Gobierno José María Aznar para las elecciones generales de 1996.

Ortega, que ha descrito a Correa como una persona “afable pero con un sentido de humor bastante peculiar”, ha continuado contando que su primer contacto profesional fue el día que le presentó un proyecto para organizar uno de los congresos regionales en el que fue elegido el actual presidente del Senado, Pío García-Escudero, como presidente de los 'populares' madrileños. “Me presentó una oferta que no pude rechazar”, ha añadido.

En ese momento, Ortega ejercía de 'número 3' del PP de Madrid, cuya responsabilidad -ha constatado- era llevar la organización de campañas en la Comunidad de Madrid. El exacalcalde de Majadahonda, por tanto, tenía en ese momento la capacidad de “contratar, de coordinar todos los equipos de trabajo”, aunque no de revisar el presupuesto. “Tuve el honor de organizar dos campañas”, ha añadido.

“Correa tiene miedo escénico”

“Correa tiene miedo escénico”, ha subrayado Ortega al momento que ha indicado que no recuerda que el empresario participase en los mitines finales de campaña de la Comunidad de Madrid que él mismo coordinó mientras era el responsable. Asimismo ha resaltado el compromiso del presunto 'cabecilla' de la Gürtel con su trabajo: “El señor Correa me decía que el histérico era yo, mentira, el histérico era él. Yo pedía el 1.000% y él el 3.000%”, ha señalado.

Sobre los regalos que supuestamente hizo el empresario al exalcalde como bolsos de marca o viajes, Ortega los ha enmarcado como obsequios que hace un “buen amigo”. Así, ha destacado que el bolso fue una entrega que hizo por el cumpleaños de su mujer, Gema Matamoros, mientras que un crucero por el Mediterráneo sirvió para “festejar” el nacimiento de su hijo pequeño -del cuál Correa es el padrino-.

El presidente del tribunal, Ángel Hurtado, le ha interrumpido en varias ocasiones para que fuese más conciso en su contestación ya que, según ha dicho, no hace falta que cuente tal “cantidad de detalles” de su labor política: “Le pido que concrete lo más posible a esas preguntas que se le hace yendo directamente al grano”, le ha pedido.

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