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Europa amenaza a España con llevarla a los tribunales por permitir la caza de aves cantoras protegidas por la ley

El jilguero es el pájaro cantor más atrapado por el silvestrismo.

Raúl Rejón

Europa ha avisado a España de que debe prohibir de manera general la caza de aves cantoras. Y amenaza con llevar el caso a los tribunales si no se da una respuesta satisfactoria para pararla en dos meses, según ha confirmado este miércoles la Comisión Europea. Permitir esta práctica, base del silvestrismo, conduce a un proceso sancionador.

El Ejecutivo europeo ha remitido la advertencia urgiendo al Gobierno a que se adecue la legislación sobre caza a la legalidad de la Unión Europea, en especial la normativa sobre conservación de aves silvestres. La CE ha revisado la situación de cinco especies codiciadas por los silvestristas: el jilguero, el pardillo común, el verdecillo, el pinzón y el verderón, cuentan fuentes comunitarias.

Aunque varias comunidades autónomas ya han regulado en contra del silvestrismo, esta práctica para apresar con redes ejemplares de especies cantoras como el pinzón o el jilguero todavía encuentra amparo en algunas regiones. “Los Estados pueden derogar la protección estricta si no existe otra solución satisfactoria” para la captura y mantemiento de especies en cautividad. Y “siempre que las especies afectadas se mantengan en un nivel satisfactorio”. En el caso español: “No se cumplen estas condiciones”.

Así la Comisión exige a España que “detenga la caza con redes”, es decir, el silvestrismo. Y añade que la cría en cautividad es “una alternativa satisfactoria”. Si España no toma medidas en dos meses, el caso puede acabar en los tribunales.

El expediente sancionador contra España por esta práctica cinegética amparada por la federaciones de caza arrancó en septiembre de 2016. Bruselas ya explicó entonces que solo caben salvedades a la protección aplicadas de forma“juiciosa” y para un “número pequeño”: desde 2013, los cupos suman un millón de pájaros.

Las asociaciones silvestristas y las federaciones de caza que las acogen han tratado de zafarse de la ley alegando que su actividad no es para matar a los ejemplares, que luego liberan las especies no buscadas y que se trata de una tradición de honda raíz en los lugares donde se practica.

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