Feijóo intenta 'compartir' a Marcial Dorado con el bipartito
El foco es la cuestión. Como en su comparecencia parlamentaria del pasado miércoles, el presidente de la Xunta insistió este jueves en compartir de alguna manera con la oposición su relación con Marcial Dorado. Lo hizo después de la reunión semanal del Consello da Xunta, sesión que el Gobierno atestó de asuntos de trámite y de informes sin validez legal pero que tuvo, nuevamente, un turno de preguntas capitalizada por el asunto del narcotraficante. Al igual que en el Parlamento, el presidente volvió a procurar equiparar sus fotografías en el barco de Dorado con la concesión de “ayudas y subvenciones” desde la Administración autonómica en tiempos de la coalición de PSdeG y BNG. No por una cuestión de “legalidad”, sino de “hipocresía”, razona.
Con los tres grupos de la oposición reclamando en el propio Parlamento todos los documentos sobre posibles relaciones económicas entre las empresas de Dorado y el Gobierno, Feijóo comienza a destilar parte de esa información para proclamar que “donde mayores ayudas y subvenciones” recibieron estas compañías fue “en el período 2005-2009”, esto es, durante el bipartito. “Las empresas del señor Dorado” tuvieron una aportación de “125.000 euros en el período del bipartito” por “solidaridad” a causa “de los daños producidos en instalaciones de sus empresas”. Este podría ser el caso, por ejemplo, de las ayudas de emergencia que la Xunta habilitó en 2006 tras unas importantes inundaciones.
A pesar de admitir que no es posible ponerle “ningún fallo de legalidad” a la concesión de estas ayudas, Feijóo se empeña en preguntarse “cómo es posible” que las empresas las recibieran “sabiendo” los gobernantes que Dorado “estaba en la cárcel” porque ya era “narcotraficante”. “Se le imputa a un presidente que no conociera a una persona que posteriormente tuvo una sentencia por narcotráfico, no puede ser que los mismos estén dando ayudas y subvenciones cuando esa persona está en la cárcel, eso se llama hipocresía política”, insiste el presidente obviando, no obstante, que cualquier empresa puede recibir ayudas si es legal y cumple los requisitos exigidos en la convocatoria.
Contratos por 5.000 euros en su primer mandato
Las múltiples preguntas de la prensa al respecto -que, una semana más, incomodaron notablemente al equipo del presidente- provocaron que Feijóo dejara caer una gota más de información. En su primera legislatura como presidente “hay facturas, que no ayudas”, por “importe de 5.000 euros” en concepto de “efectos navales y otras cuestiones en algunas instalaciones” adquiridos la empresas vinculadas con Dorado. Así y todo, lo que no revela por el momento es si hubo o no contratos “en el resto de legislaturas, en las que estuvo el presidente Fraga”. Esas, dice, “se remitirán al Parlamento” como pide la oposición, cuando terminen las consultas de diversos sistemas “informáticos” de la Administración.
En este contexto el titular de la Xunta no disimula la cólera contra PSdeG, AGE y BNG, a cuyos portavoces, dice, si les “vieron con claridad las entrañas” durante su comparecencia. La Pachi Vázquez, Xosé Manuel Beiras y Francisco Jorquera no sólo los culpa de ser “hipócritas”, sino también de “ganar a pulso” la “desafección que tienen los ciudadanos sobre la política”. “Menos mal que en el Código Penitenciario no está tipificado como delito a hipocresía”, acrecienta, en un tono por veces hostil con los informadores.
Mientras esto sucedía en San Caetano, en el Parlamento socialistas y nacionalistas ofrecían sendas ruedas de prensa en las que tanto Abel Losada como Francisco Jorquera no dieron, ni mucho menos, el asunto por cerrado. Para Losada Feijóo “insultó” al conjunto del país en su comparecencia, “fiel reflejo de su catadura moral”, en la que quedó patente que “lo que siente es la publicación de las fotos” y no “las consecuencias del narcotráfico”. “Antepone sus intereses a los de la ciudadanía, y eso es lo peor que puede hacer un presidente”.
Por su parte, Jorquera, que también pidió “una relación detallada de todas las subvenciones y todos los contratos” de empresas de Dorado con la Xunta, considera que el propio Gobierno gallego debería remitirle también esta documentación a la Fiscalía “si observa indicios de delito”. Al margen de los contratos, Jorquera rechaza la técnica “del ventilador” que, dice, pone en marcha el presidente, y no duda que tras su “comportamiento vergonzoso” y de “falta de respeto al Parlamento” hay aún “más motivos para demandar su dimisión”.
