El PSOE andaluz calla sobre el cambio de fecha del congreso del partido a la espera de “conocer las razones”
El secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, ha confirmado que su homólogo en Ferraz, César Luena, le ha llamado para abordar la fecha del congreso en el que el partido decidirá su secretaría general, en estos momentos ostentada por un Pedro Sánchez que quiere repetir. Sin embargo, el número 2 del PSOE-A ha evitado pronunciarse sobre el planteamiento de retrasarlo, especialmente porque fue esta federación una de las más beligerantes para que se convocara en mayo, pese a que luego ha presionado para posponerlo.
“Le he manifestado que en Andalucía vamos a esperar a conocer las razones de la dirección federal, y de los compañeros de otras federaciones, para poder posicionarnos (...), pero nunca seremos un obstáculo”, ha comentado este lunes sobre qué le ha trasladado a César Luena cuando le ha consultado sobre este extremo, que cierto sector del PSOE-A interpreta como un reconocimiento de que Pedro Sánchez no va a conseguir formar gobierno y está ganando tiempo ante un liderazgo debilitado. “Es la fecha en la que está convocado”, ha repetido cuando se le ha preguntado si le parece bien el calendario fijado en estos momentos, para los días 20, 21 y 22 de mayo.
Ha insistido en que es necesario que haya “consenso” para cambiar la fecha, cosa que no sabe todavía “si existe”, pese a que la mayoría de las federaciones lo ha acogido bien. Con ello, el PSOE-A huye de situarse en una posición contradictoria después de que en el comité federal del pasado mes de diciembre impusiera que el congreso fuera en mayo, frente a la intención de Pedro Sánchez de dejarlo para más adelante y tener margen para negociar su investidura o incluso llevar una campaña sin guerra interna si se repiten las elecciones generales, donde querría continuar como candidato.
El PSOE-A pretende con esta prudencia, que ya estrenó hace unas semanas, que no parezca que le está marcando el ritmo a Ferraz y torpedeando el trabajo del líder para imponer a su secretaria general, Susana Díaz, máxime cuando las presiones que ésta recibe para disputarle el liderazgo a Pedro Sánchez le vienen más de fuera que de dentro, donde creen que tiene tiempo para coger el tren en mejores condiciones. Otra cosa será hasta cuándo se pospone el congreso, lo que abrirá otra batalla porque el PSOE-A no está por la labor de esperar a septiembre como han insinuado desde Ferraz.
Lo decía a la misma hora en que la secretaria general del PSOE-A y presidenta, en su empeño de alejarse del ruido sobre su futuro y mostrar que está “centrada en Andalucía”, presentaba el Plan Andaluz de Investigación, Desarrollo e Innovación (Paidi), aprobado recientemente por el Consejo de Gobierno y desglosado entonces por el consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano. De hecho, Juan Cornejo tampoco ha querido valorar si el silencio de Susana Díaz sobre sus intenciones está alimentando especulaciones y perjudicando el Gobierno de Andalucía. “Ella seguro que lo dirá claro cuando llegue el momento”, ha recalcado, sin querer valorar tampoco cuánto ha pesado en la decisión de Ferraz que Susana Díaz haya comunicado a gente de su entorno y a periodistas que le disputará el control del PSOE a Pedro Sánchez independientemente de cuándo fuera el congreso.
La decisión de cambiar la fecha del cónclave llega cuando se han cumplido 100 días desde las elecciones generales del pasado 20 de diciembre sin que todavía se haya conformado el Gobierno de España. “Tenemos un candidato, Pedro Sánchez, que está haciendo todo lo que puede para la búsqueda de un gobierno desde el consenso y el diálogo”, ha manifestado Juan Cornejo, convencido de que “han sido 100 días perdidos” para los problemas del país en los que el líder del PSOE “no ha dejado de intentar” una salida frente al “boicot” del PP y Podemos.
“En cuanto Podemos se ha sentado en el Congreso de los Diputados, ha imitado lo que practicaba en Andalucía: el seguidismo al PP”, ha continuado, acusando a las dos formaciones de “sordera y ceguera política”. Especialmente molesto por el último frente abierto por los líderes en estos dos partidos en Andalucía, que se han centrado en atacar a Susana Díaz vinculándola con el supuesto fraude de la formación. “Se les ha caído el montaje que tenía preparado con la comisión de investigación de la formación y recurren a la insidia (...) y apuntan a la presidenta, que ni siquiera estaba”, ha insistido. “No todo cabe en política”, ha proseguido.
En este contexto, Susana Díaz baraja en firme optar a la secretaría general, pese a que no lo confirmará hasta el último momento. No dice que vaya a hacerlo, pero tampoco lo niega, sencillamente porque es una posibilidad que maneja cada vez con más convencimiento. Una de las cuestiones que podía frenar a Susana Díaz era que tenía hasta el 11 de abril para confirmar si se presentaba, mientras que Pedro Sánchez contaba con hasta el 2 de mayo para intentar formar gobierno, de manera que si lo consiguiera no se entendería que quisiera disputarle la secretaría general del partido al presidente del país.
Con el retraso del congreso, dependiendo de hasta cuándo, lógicamente, se difumina en principio este inconveniente, e incluso se le brinda la posibilidad de conseguirlo por aclamación si unos malos resultados de Pedro Sánchez -peores que el 20D- que le imposibilitaran también formar gobierno en una hipotética repetición de las elecciones generales el 26 de junio lo llevan a renunciar, como ya hiciera su predecesor Alfredo Pérez Rubalcaba.
