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De Los Vengadores a “la tortuga”. Así nació Adelante Andalucía

A la izquierda, el logo de Los Vengadores (Avengers, en inglés), a la derecha, el logo definitivo de Adelante Andalucía.

Daniel Cela

En el principio, Teresa Rodríguez y Antonio Maíllo iban a ser Los Vengadores. Hace dos meses, los líderes de Podemos e IU en Andalucía encargaron a una pequeña agencia de publicidad [La Huerta] el diseño del logo para la marca electoral con la que pretendían concurrir juntos a las elecciones autonómicas: Adelante Andalucía. Una de las primeras propuestas que barajaron los publicistas y diseñadores gráficos de La Huerta fue una “enorme A mayúscula, muy parecida al logo en inglés de Los Vengadores” [Avengers], la película que reúne a todos los superhéroes de cómic de Marvel para salvar el mundo. “A mí era el que más me flipaba, la verdad”, admite David Fons, responsable de Redes Sociales y Creatividad de la agencia.

La A de Los Vengadores se descartó, probablemente no por estas reminiscencias de héroes contra villanos, sino porque “visualmente era una A muy rocosa, muy rotunda y demasiado rígida”. “Lo que buscábamos era una A más amable y en movimiento, una letra que fluye o confluye, que cuando la miras da buen rollo”, explica Dolores Costa, ejecutiva de cuentas y contenidos de la agencia.

Hace dos meses, a principios de junio, Adelante Andalucía se presentó como el nombre de una plataforma digital que buscaba sumar el apoyo de 50.000 personas a la confluencia. La dirección estatal de Podemos dio un respingo: ¿ese es el nombre de la confluencia? ¿Es la marca electoral que va a sustituir a Podemos en la papeleta? La respuesta fue no, pero en ese momento Rodríguez y Maíllo ya habían encargado a los jóvenes publicistas de La Huerta el diseño del logo y la marca electoral. Antes de las primarias internas de Podemos que dieron la victoria a Teresa Rodríguez, antes de la negociación con la dirección estatal sobre el nombre de la confluencia andaluza, antes de la confección de las listas electorales de IU.

Rodríguez y Maíllo avanzaron desde el principio con la decisión tomada: el nombre de Adelante Andalucía empezó a moverse por todas las provincias, en actos pequeños dirigidos por ambos líderes, que llevaban casi dos años construyendo la confluencia. “Nos dieron el documento con el argumentando político y el vídeo promocional de Adelante Andalucía. Nos contaron cómo había nacido el proyecto y qué significado tenía para ellos y para lo que querían conseguir. Desde el principio lo entendimos como algo que debía expresar un movimiento de ilusión en Andalucía”, explica Costa. La pequeña agencia de publicidad La Huerta tiene su oficina pegada a la sede de Podemos Andalucía, son cuatro miembros (uno de ellos había sido alumno del instituto donde dio clases Antonio Maíllo, líder de IU).

La paradoja de la crisis interna en Podemos

En estos dos meses, desde que se lanzó el lema Adelante Andalucía, el nombre ha ido cristalizando en el imaginario colectivo como la nueva marca de Podemos e IU para las elecciones. El nombre de la confluencia andaluza, que lleva casi dos años gestándose a base de reuniones, encuentros y pactos entre Teresa Rodríguez, Antonio Maíllo y sus respectivos equipos. Otras fuerzas de izquierdas, como Equo y los grupos andalucistas Primavera Andaluza e Izquierda Andalucista, se han sumado al proyecto sin poner trabas a la marca. La paradoja es que, en estos dos meses, el nombre de Adelante Andalucía se ha popularizado, sobre todo, gracias al pulso interno entre la dirección estatal y andaluza de Podemos.

Los continuos choques dialécticos entre el secretario de Organización, Pablo Echenique, y Teresa Rodríguez han mantenido el interés de los medios de comunicación que, irremisiblemente, siempre acababan hablando del nombre de Adelante Andalucía. Al principio las direcciones regionales de Podemos e IU temían que la polémica sobre la marca eclipsase el proyecto, “que cobrara más relevancia la crisis interna en la formación morada, en vez de proyectar ilusión por la confluencia”. Luego ellos mismos se dieron cuenta de que un proyecto necesita un nombre para hacerse real, y la batalla por el nombre lo estaba haciendo real. “Si les sale bien, ellos son los únicos que presentarán un juguete nuevo en las elecciones”, reconoció un dirigente socialista del entorno de Susana Díaz. “Ha sido una campaña de publicidad impagable, y gratis”, dice un miembro de la ejecutiva regional.

Con todo, la crisis interna de Podemos ha sido todo menos una estrategia de márketing. El pulso por el control del partido en Andalucía, la elaboración de las listas y el manejo del censo de inscritos es muy real. Teresa Rodríguez ha doblado el pulso a la dirección estatal cuando ésta se encontraba más debilitada: justo en medio de la polémica por el chalé de 600.000 euros que compraron Pablo Iglesias e Irene Montero -que sometieron su dimisión a una consulta de las bases-. El nacimiento prematuro de los hijos de la pareja obligó a Echenique a lidiar en solitario con la dirección andaluza, que parecía estar en rebeldía.

Desde el principio, la dirección estatal de Podemos expresó suspicacias y recelos respecto al nombre de Adelante Andalucía. ¿Es el nombre de un nuevo partido político? ¿Teresa Rodríguez está intentando escindirse de Podemos y montar una nueva organización camuflada en el proyecto de confluencia con IU? ¿Anticapitalistas intenta ganar terreno orgánico dentro de la formación morada? Y esa plataforma digital en la que quieren integrar a 50.000 personas, ¿acaso no es un censo paralelo al margen de los inscritos de Podemos? Todas esas sospechas de Echenique cristalizaron más tarde en el argumentando de una candidata alternativa que se postuló en las primarias internas de Podemos para frenar el proyecto de Teresa Rodríguez.

Un puente, una sonrisa, un abrazo

La diputada en el Congreso por Huelva, Isabel Franco, dimitió de la ejecutiva de Podemos Andalucía, acusando a su líder de actuar de forma desleal, de espaldas a la dirección estatal, y con el secreto propósito de montar un nuevo partido llamado Adelante Andalucía. Franco convirtió su dimisión en plataforma de lanzamiento de su candidatura en las primarias contra Rodríguez, y la dirección estatal se alineó desde el principio con ella. Perdió. Perdieron, y Adelante Andalucía se presentó sin complejos como marca electoral para las autonómicas, reforzando el liderazgo de Teresa Rodríguez -logró el 75% de votos de los inscritos- y su proyecto de lograr un Podemos más autónomo, más andaluz. “Un 28F de Podemos”, dijo la gaditana.

El pasado 27 de julio se presentó en público el logo de Adelante Andalucía, el secreto mejor guardado por la dirección regional de Podemos para no soliviantar más a sus dirigentes de Madrid. Finalmente se destapó la cortina y todo el mundo pudo ver aquel símbolo verde, dos aes invertidas, “abrazadas”, una sobre otra. A unos les parecía un puente, a otros una sonrisa, una ola, una A atravesada por una sonrisa, el arco de una mezquita musulmana o el de un templo cristiano… Muchos, incluida la hija del secretario de Organización andaluz, Nacho Molina, veían una tortuga. “La tortuga es un animal simpático, a todo el mundo le cae bien la tortuga”, dice Molina. A' de “Andalucía”, de “adelante”, de “abrazos”, de la primera letra del abecedario, de “alfa griega”. Teresa Rodríguez no pudo resistirse: “Esto es el nacimiento de algo, ha sido como un parto, a veces puede doler, pero al final queda algo ilusionante”.

Adelante Andalucía será la marca que se inscribirá como coalición electoral en el registro de partidos del Ministerio de Interior para las próximas elecciones andaluzas, que se barruntan para este otoño. Debajo de estas dos palabras aparecerá el nombre de Podemos, IU, Equo, Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza. Así, aunque el logo morado aparezca más pequeño que el verde, se cumple con el mandato del 92% de inscritos de Podemos, que pidió mantener su nombre en la papeleta. La dirección estatal parece haberse resignado a la autonomía política que ha esgrimido Teresa Rodríguez, con ayuda de IU, por la vía de los hechos. El siguiente capítulo de Los Vengadores será en la segunda quincena de septiembre, cuando los integrantes de la confluencia se sometan a unas primarias conjuntas de la que saldrá la lista definitiva de candidatos a las andaluzas. Y el candidato o candidata a la presidencia del Gobierno de Andalucía.

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