Comedor solidario en verano para niños de familias con dificultades económicas
Durante los meses de julio y agosto el restaurante La Mulata, junto con la ONG Nueva Vida, dan de comer a diario a 65 niños de entre 3 y 12 años procedentes de familias con dificultades económicas.
Los niños, que se reúnen en un local cedido por una comunidad de vecinos en Peñacastillo, acuden sobre las 12 de la mañana y son cuidados por voluntarios, que se encargan de darles de comer y hacerles el día un poco más ameno hasta las 16:00 horas que acuden a buscarlos sus padres.
La Mulata se encarga de llevar los menús, compuestos por primer plato, segundo y postre, hasta el local donde se encuentran los chavales y, además, les entregan una bolsa para la merienda con un sándwich, un zumo, una botella de agua y una pieza de fruta.
A pesar de que este año se han añadido 20 plazas respecto al verano de 2014, el pudor hace que las familias cántabras no soliciten esta ayuda.
El perfil de los niños que acuden son en su mayoría inmigrantes, con un gran número de niños árabes, por lo que tienen que cuidar el tipo de comida, según nos ha contado el gerente del establecimiento, Jaime Ruigómez. Los menús que elaboran son muy variados e incluyen platos como macarrones, sopa, paella, guisantes, lenguado, rape o ternera, entre otros.
Esta iniciativa se realiza entre julio y agosto porque son los meses en los que los comedores de los colegios permanecen cerrados.
Todas las familias que deseen solicitar una plaza pueden hacerlo aún poniéndose en contacto con la ONG Nueva Vida de Santander.
