Revilla entra en la campaña del 26J de la mano de Pedro Sánchez
La decisión del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) de no concurrir en las próximas elecciones generales, tal y como sucedió el pasado 20D, ha convertido a Miguel Ángel Revilla en árbitro de la contienda. Los cotizados votos regionalistas -más de 96.000 papeletas y un 30% del electorado en los comicios autonómicos- pueden decidir el reparto final de escaños en la comunidad autónoma, algo que tienen muy claro todos los aspirantes.
Desde su posición institucional como presidente de Cantabria, el líder del PRC se deja querer y busca una proyección nacional que le permita poner sobre la mesa muchas de sus reivindicaciones tradicionales. Así, Revilla ha estrenado esta larga precampaña con una visita oficial de Pedro Sánchez, el candidato del PSOE, para el que solo ha tenido buenas palabras: “Es una persona limpia, honrada y coherente”, ha subrayado.
Y es que el presidente de Cantabria ha recibido este miércoles en la sede del Gobierno autonómico al secretario general de los socialistas y le ha deseado “lo mejor”. “Espero que obtenga un gran resultado electoral”, ha insistido tras un encuentro de menos de media hora en una rueda de prensa conjunta en la que han estado acompañados por la líder de los socialistas cántabros y socia de Revilla en el Ejecutivo, Eva Díaz Tezanos.
De hecho, Revilla -que volvió a la Presidencia de Cantabria de la mano del PSOE, como ya hiciera entre 2003 y 2011- ha admitido que para un Gobierno autonómico “es bueno que haya sintonía con el Gobierno de la Nación” para que no haya “tantas pegas” para tener un interlocutor en Madrid.
Por eso, el presidente de Cantabria cree que “lo mejor” es que Mariano Rajoy “se vaya a la oposición”. “El PP merece estar en la oposición”, ha sentenciado, para recalcar también que Sánchez ha sido designado candidato en unas elecciones primarias de su partido y “no a dedo”.
Revilla también ha ensalzado la “coherencia” de Sánchez a la hora de hablar de posibles pactos con otros partidos para formar Gobierno y ha afirmado al respecto que, en ese sentido, “es un ejemplo”. Sobre este asunto, ha subrayado las manifestaciones del líder socialista de que “jamás” pactará con el PP, que “ha amparado de forma escandalosa la corrupción”, mientras que Sánchez y el PSOE “han intentado por todos los medios cortar de raíz y frenar cualquier atisbo de corrupción”, que es “el gran problema de España”.
Viejas promesas
Por su parte, el secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha comprometido con Cantabria a “impulsar el tren de altas prestaciones” entre Santander y Madrid, “promover la reindustrialización de Torrelavega y la comarca del Besaya”, así como a regresar en 2017 para celebrar el Año Jubilar Lebaniego si es presidente tras las elecciones generales del próximo 26 de junio.
Sánchez ha asegurado que se ha fijado mucho en lo que se ha hecho en la comunidad autónoma durante el último año y ha considerado que “a Cantabria le ha sentado bien el cambio”. “No solo porque en Cantabria ahora tenemos un Gobierno limpio, dialogante y con talante social” sino porque, a su juicio, las políticas que está poniendo en marcha el Ejecutivo de coalición “son en beneficio de la mayoría de los cántabros”.
El secretario general del PSOE ha opinado que las elecciones generales del próximo 26 de junio “no son una segunda vuelta” sino “una nueva oportunidad para cambiar las cosas en España y ha augurado que los españoles ”confiarán de forma mayoritaria“ en su partido.
