Araceli Martínez: “A lo largo de estos cuatro años ha habido un parón en políticas de Igualdad”
Natural de Guadalajara, Araceli Martínez fue una de las personas que acompañó a García-Page en la foto del acto de investidura. En aquella ocasión, el presidente regional avanzó que la guadalajareña sería la directora del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, con la peculiaridad de poder participar en el Consejo de Gobierno y aportar ideas como un diputado más. Antes de llegar a su puesto actual, Araceli fue concejala de Igualdad en su ciudad, diputada regional y candidata al Parlamento Europeo. Estudió Trabajo Social y fue en su época universitaria donde participó en varios movimientos sociales, especialmente los relacionados con el feminismo, ecologismo y derechos humanos. En esta nueva etapa, está inmersa en la lucha contra la violencia de género, en hacer llegar propuestas al Gobierno regional que sirvan para establecer medidas en materia de Igualdad y en dar mayor visibilidad al Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha.
¿Cuáles son las políticas prioritarias que llevará a cabo el Instituto de la Mujer, con usted a la cabeza?
El objetivo principal es recuperar las políticas de Igualdad, que sean reales entre mujeres y hombres de Castilla-La Mancha. Vamos a trabajar para erradicar la violencia de género asistiendo de una manera eficaz a las víctimas, a sus hijas e hijos. Por otro lado, vamos a establecer campañas de prevención para evitar que la violencia de género llegue a producirse, o por lo menos disminuir el impacto de la misma. Además, nos parece muy importante trabajar en el ámbito del medio rural, donde la desigualdad entre mujeres y hombres se ve más agravada porque todavía están más arraigados los estereotipos sexistas.
Creemos que también es fundamental abordar la corresponsabilidad y los usos del tiempo. Es un asunto que ya crea una división sexual, no solo del trabajo, si no de las tareas domésticas y de cuidados entre mujeres y hombres. Y por último, hemos iniciado conversaciones con el movimiento LGTBI (Lesbianas, Gays, Transexuales, Bisexuales e Intersexuales). Queremos elaborar un marco de actuación para abordar los problemas de discriminación que sufren las personas que forman parte de este colectivo, que se ven afectadas por las estructuras de una sociedad machista, donde predominan ciertos roles patriarcales.
¿Cuál es la próxima campaña que tienen pensado lanzar desde el Instituto de la Mujer?
Además de las medidas de sensibilización que hemos elaborado en torno al Día Internacional contra la Trata, queremos abordar campañas más intensas para la prevención de la violencia de género, de manera especial entre las personas más jóvenes. Campañas que sirvan como indicador a las chicas, de posible violencia de género que pueden estar sufriendo.
A veces pensamos que la violencia de género se circunscribe al maltrato físico, pero hay otras formas de violencia de género, de menor intensidad, que pueden conducir a las más graves. Por ejemplo, el control del teléfono, el aislamiento de los grupos de amigos y amigas, el ciberacoso,… Haremos campañas de prevención para que esos signos puedan ser detectados por las chicas, pero también habrá otras dirigidas a los chicos.
Una de las primeras novedades que se ha introducido en el Instituto de la Mujer, es la puesta en marcha de las redes sociales, ¿qué tal están funcionando y qué objetivos se busca conseguir a través de ellas?
Desde que estamos presentes en las redes sociales interactuamos de una manera bastante continua con la sociedad y con el movimiento feminista en su conjunto. Desde este organismo autónomo se organiza un gran número de políticas y de medidas que a veces son desconocidas, y queremos que haya una mayor visibilidad del mismo, en aras a una mayor transparencia y buen gobierno. El medio de comunicación mediante el cual se puede llegar a más personas, son las redes sociales, especialmente cuando hablamos de población juvenil, que es uno de los sectores a los que nos interesa dirigirnos de manera particular. También es una buena vía de transmisión de qué iniciativas estamos tomando aquí y nos permite interactuar con las personas que nos siguen, tanto en Facebook como en Twitter.
Lleva poco tiempo en la dirección del Instituto de la Mujer, pero ¿qué balance puede hacer durante este tiempo que lleva en el puesto?
Estamos trabajando muy intensamente en hacer una revisión de los protocolos, de las actuaciones, de las intervenciones,… que se están llevando a cabo, y evaluando cómo podemos implementar las medidas que deseamos a lo largo de la legislatura. Estamos realizando un trabajo intenso, no solo de puertas adentro sino también de contacto y diálogo permanente con el tejido asociativo y con la sociedad civil en su conjunto. La igualdad no es un asunto que concierna solamente a las mujeres, también a los hombres y a la sociedad en general. Mantenemos reuniones, de una manera continuada, con todos los agentes que pensamos que pueden aportar algo en favor de la igualdad.
¿Podría hacer un contraste de cómo estaba el Instituto de la Mujer antes de su llegada, cómo está ahora y qué planes de futuro hay?
Creemos que a lo largo de estos cuatro años ha habido un parón en políticas de Igualdad. No digo que no se haya asistido a mujeres con problemas, o víctimas de violencia de género, pero ha habido cierto inmovilismo a la hora de desarrollar políticas efectivas y conceptos relacionados con el feminismo.
Queremos reivindicar las aportaciones del Movimiento Feminista, que no se ha hecho hasta ahora, y apoyar toda la red de recursos de los que disponemos, para que las políticas de igualdad salgan o dejen de estar circunscritas al Instituto de la Mujer y que puedan expandirse a toda la sociedad. Yo creo que eso sí va a marcar un punto de inflexión, que será la trasversalidad, un concepto que se consagró ya hace veinte años en Beijing, al cual aludimos constantemente, pero que luego es muy difícil materializar. En base a esto, uno de los pasos que se ha dado es que la directora del Instituto forme parte del Consejo de Gobierno. La coordinación con las consejerías, a la hora de hacer plausible esa trasversalidad, estando en el Consejo de Gobierno, es mucho más fácil.
Page ya anunció en su investidura que participaría en el Equipo de Gobierno, ¿está siendo así de forma regular?
El Consejo de Gobierno se reúne todos los martes y yo asisto a las reuniones exactamente igual que cualquier Consejería y, al mismo tiempo, formo parte del proceso de toma de decisiones que se adoptan por parte del Gobierno. Esto es una ventaja, porque una de las principales estrategias para hacer realidad la igualdad entre mujeres y hombres es la trasversalidad. Por lo tanto, trasladar eso al Consejo de Gobierno es fundamental.
En cuanto a la violencia de género, ¿cuál es la situación en la que se encuentra la región a día de hoy?
En 2014, en la línea gratuita 900 100 114 (de atención a víctimas de violencia de género), que es como el 016 a nivel nacional, se recibieron aproximadamente unas 6.000 llamadas en relación a la violencia de género. Y en los Centros de la Mujer, se hicieron aproximadamente unas 26.000 intervenciones, entre consultas, atención, etc. No estamos en una situación, respecto a otras comunidades autónomas, que nos alarme, pero en cualquier caso, que existan casos de violencia de género, es alarmante por sí mismo y, por lo tanto, nos tiene que animar a trabajar.
Hay un campo de trabajo inmenso, de atención y prevención. Que aumente el número de llamadas y de preocupación entre chicas jóvenes nos está indicando que la sociedad que estamos construyendo no es tan igualitaria como pensábamos y que, de hecho, se perpetúan muchos roles y estereotipos relacionados con la desigualdad de género.
¿Qué medidas se pueden tomar para reducir ese número?
Las campañas de prevención son esencial. En España, a lo largo de los últimos cuatro años, que se han reducido las campañas de prevención, por ejemplo en medios de comunicación, ha aumentado de manera alarmante el número de casos de violencia sin haber interpuesto denuncia. Si con las campañas cubrimos un determinado ámbito de relación de las personas, debemos pensar en otra agencia de socialización y también preventiva, como es la escuela. Estamos colaborando con la Consejería de Educación de una forma intensa para poder crear entre todos una verdadera escuela coeducadora, donde un valor, como es el de la igualdad, imane todos los contenidos que en la escuela se desarrollan.
¿En qué consistirá el protocolo contra la trata que el Gobierno regional va a poner en marcha y cómo ha incidido el Instituto de la Mujer en esta cuestión?
Vamos a iniciar el proceso para la elaboración del protocolo. Aunque teníamos unas ideas previas de cómo queríamos trabajar, el Gobierno de España hizo público un nuevo plan nacional contra la trata. El plan anterior había finalizado su vigencia en 2012, han tenido que transcurrir cuatro años para que esté presente uno nuevo. Los objetivos sobre los que estábamos trabajando estaban relacionados con el anterior. Ahora vamos a evaluar bien cuál es el plan de trabajo que presenta el Gobierno de España y de una manera coordinada, para no solapar el trabajo entre administraciones, vamos a ver cómo nos imbricamos dentro. Qué tarea de cooperación y administración vamos a establecer entre el Gobierno estatal y el Gobierno autonómico para atajar un problema importante como es el de la trata.
La prevención es importante. Dentro del ámbito de competencias que conciernen al Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, una de ellas es la concienciación y la prevención. Que la sociedad conozca cuáles son las implicaciones que tienen la trata y la prostitución, y las maneras de evitarlas, que es no consumir prostitución.
¿Qué opinas de la situación actual que hay sobre el tema del aborto?
Yo estoy muy de acuerdo con la ley que se aprobó, en su momento, por el Gobierno de Zapatero. Se trataba de una ley de derechos, sexuales y reproductivos, y de educación afectivo-sexual mucho más saludable e igualitaria. Yo me quedo la parte de prevención, la de las medidas que hemos de tomar como sociedad para evitar que haya embarazos no deseados. Creo que es la línea en la que debemos trabajar todas y todos, desde el Gobierno de España, hasta los Gobiernos autonómicos o los locales. Porque esto es un aspecto que afecta, no solamente a los derechos de las mujeres, sino también a la salud de las mujeres.
¿Qué opinión le merece el ‘Proyecto Mater’? Un plan que ha activado la Archidiócesis de Toledo que incita a las mujeres a continuar con el embarazo mediante consultas virtuales y WhatsApp.
No lo conozco, pero me parecen absolutamente respetables todas las iniciativas que se tomen en favor de las mujeres, de la protección de la maternidad y del respeto al derecho de las mujeres cuando no quieren seguir adelante con el embarazo. Estar a favor del IVE (Interrupción Voluntaria del Embarazo) o de la ley de salud sexual y reproductiva, no significa estar a favor del aborto. Significa estar a favor de dar una cobertura legal a todas las situaciones frente a las cuales se puedan encontrar las mujeres, y las que se quedan embarazadas sin desearlo tienen que tomar una decisión: seguir adelante con el embarazo o no. Y en cualquiera de esas decisiones, las administraciones públicas deben establecer mecanismos de protección para hacer efectivo ese derecho. La iglesia católica tiene un posicionamiento muy claro en esta cuestión y a mí me parece respetable, porque creo que la tolerancia es la base de la convivencia.