El Ayuntamiento de Mora pide calma ante los sucesos violentos de los últimos días
Después de una manifestación que nació a través de mensajes de móvil, redes sociales y el boca a boca, el Ayuntamiento de la localidad toledana de Mora ha pedido a sus habitantes calma por lo sucedido en los últimos días. Todo viene a raíz de la presencia en el pueblo del clan de 'Los Macacos', una familia a la que se apunta instigadora de la violencia que algunos vecinos achacan a los dos últimos años, precisamente los que lleva la familia viviendo allí, y que llegó a su punto más álgido el pasado fin de semana con robos mientras se celebraba la Fiesta del Olivo de la localidad, una pelea multitudinaria el sábado comenzada en teoría por jóvenes de este clan, y un apuñalamiento llevado a cabo en teoría por el padre de la familia.
Tras todos los incidentes y por la inseguridad que vivían, los morachos decidieron salir a la calle espontáneamente y concretamente a la calle de la casa de 'Los Macacos' para pedir por un lado al Ayuntamiento que actúe de una vez ante esta familia y por otro que se vayan y dejen de molestar la vida vecinal del pueblo. Algunos achacaban al Ayuntamiento lo demasiado que han tardado en actuar ante un problema que algunos, siempre hablando a cara cubierta y con miedo a represalias, “se veía venir”. De hecho algunos de los manifestantes y concentrados declaraban que habían recibido amenazas de muerte por estar ahí presentes.
El Ayuntamiento ha declarado que todos los miembros del clan ya están fuera de Mora y que el padre, detenido el sábado acusado de dos puñaladas y que fue detenido con un cuchillo en la mano, quedará en libertad provisional bajo orden de no poder volver al término municipal de Mora, pero los ciudadanos no están convencidos de la versión del Ayuntamiento, indicando algunos que han visto a algunos de los jóvenes del clan con coches de alta cilindrada por el pueblo en las últimas horas.
El Ayuntamiento también animó a la gente a que no asistiera a esta manifestación espontánea que se formó ya que “no tiene permiso de Delegación de Gobierno ni el Ayuntamiento”, a pesar de lo cual más de 500 personas se personaron en la zona. Palizas y reyertas con jóvenes del pueblo sin existir problema previo, robos aprovechando las fiestas del pueblo son algunos de los episodios que achacan a la familia. No sentó bien a los ciudadanos que el Ayuntamiento no apoyará la manifestación y que de hecho animara a no participar.
Por ello los morachos, y porque en 20 días celebran sus fiestas del Olivo (de Interés Turístico Nacional), piden al Ayuntamiento una solución urgente y de confianza, porque no creen que la situación conforme ha quedado ahora esté resuelta. El miedo se ha instaurado en el pueblo que quiere volver a tener una vida ciudadana normal sin miedo a que les roben, apalicen o amenacen.