Quién fue Mariano Benlliure: la historia de las manos tras el busto de los Premios Goya

Con la 36 gala de los Goya, la ciudad de Valencia se ha convertido en un homenaje a uno de sus escultores más emblemáticos, autor del busto que representa el galardón. Reproducciones gigantes de la estatuilla de los Premios Goya se ubican desde el pasado viernes en 12 puntos de la ciudad como reclamo y homenaje a las manos que esculpieron la estatuilla: las del escultor Mariano Benlliure Gil.

Benlliure (Valencia 1862- Madrid 1947) forma parte de una tríada emblemática de la ciudad de finales del siglo XIX y principios del siglo XX junto al escritor Vicente Blasco Ibáñez y el pintor Joaquín Sorolla. En 2013, el Ayuntamiento de Valencia dedicó la muestra BSB Tres amigos valencianos (Benlliure, Sorolla y Blasco Ibáñez) a obras y correspondencia de los tres artistas. Benlliure, el menos conocido, fue el nexo de unión entre ambos, homenajeándoles en sus composiciones. Suyo es el cenotafio de Blasco Ibáñez, que hasta abril del pasado año permanecía en el Museo de Bellas Artes, pensado por el escultor para coronar su cripta, y suyo es el busto de Sorolla, encargado por la Hyspanic Society. Junto a ellos y otros artistas fundó, en 1894 en Valencia, el Círculo de Bellas Artes, para fomentar las relaciones profesionales y el apoyo mutuo en diversas disciplinas. A la par, en plena efervescencia de la Valencia intelectual, Blasco Ibáñez presentaba su diario El Pueblo y Teodoro Llorente, la Exposicion Nacional de 1895, donde Sorolla ganó la primera medalla.

El estudio de la correspondencia de Benlliure y Sorolla de la historiadora Violeta Montoliu apunta a las aspiraciones de ambos de construir una escuela de Bellas Artes en Valencia. Montoliu reseña “una reconocida raigambre artística con la que se sienten comprometidos y por la que emprenden con gran ilusión un proyecto que nace como un sueño”, y apunta: “El impulso inicial, nacido en el seno de una Asociación de Artistas Valencianos que se mantiene a lo largo de dos décadas sin respaldo institucional alguno, nos hace replantear de nuevo el concepto de 'escuela' desde el punto de vista sentimental de sus miembros entre los que se encuentran los dos citados artistas que, aunque viviendo y trabajando en Madrid y en el extranjero, se esfuerzan denodadamente por dignificar la profesión y el reconocimiento del arte valenciano”.

Benlliure, hijo y hermano de pintores, se inició en la escultura de manera autodidacta trabajando en distintos talleres hasta que en 1881 marchó a Roma para completar su formación. Al principio trabajó como pintor-acuarelista y con los beneficios pudo dedicarse más libremente a la escultura, oficio que le valdría el reconocimiento. Desde la capital italiana enviaba sus trabajos con los que comenzó a coleccionar galardones en los certámenes y numerosas medallas en exposiciones nacionales e internacionales. En 1884 obtuvo su segunda medalla con Accidenti! (colección particular), la escultura que le dio fama, y en 1887 la primera medalla con la Estatua del pintor José de Ribera (Plaza del Poeta Llorente, Valencia), según la biografía del artista en el Museo del Prado. La pinacoteca madrileña y el Museo de Bellas Artes San Pío V de València albergan gran parte de su obra.

El busto de Goya se realizó en torno a 1902 como encargo del Ayuntamiento de Madrid para celebrar la mayoría de edad de Alfonso XIII. La obra que hoy acoge el Museo del Prado es una reducción del diseño preparado por el valenciano para la escultura de cuerpo entero del pintor, proyectada como fuente monumental para ser instalada en la ermita de San Antonio de la Florida y que finalmente se ubicó en la fachada norte de la pinacoteca. Benlliure presentó el busto de Goya en escayola en la VIII Exposición Bienal del Círculo de Bellas Artes de 1902, antes de la inauguración del monumento, que posteriormente utilizó como referencia para las réplicas en mármol y bronce. Tras un tira y afloja burocrático que duró varios años, en junio de 2019 la Academia de Cine y la fundación del escultor suscribieron un acuerdo por la cuál esta, depositaria de los derechos del escultor, autoriza su reproducción.